Fue en tu puerta
que mis manos, apenas sin rozarte
abriéndose paso entre la distancia
que nos dimos, te perdieron;
que tu voz se apagó
como se apaga el color de la noche,
despacio, sin saber ni sentir…
yéndose
tras el silencio del adiós.
Que comenzó la muerte
confundida de vida;
que sentí la derrota
del niño que pierde su lágrima
sin saber porque llora;
de aquél que con ojos cerrados
reinventa su camino
abrumado por el vacío que todo lo llena.
Fue en tu puerta,
umbral de ilusiones por cumplir,
que tu aroma, que ya olvidé,
daba sentido al momento,
respuesta a las miradas
y esperanzas a todos los sueños.
Hoy que pasó el tiempo,
que los años ajaron
paredes y memorias,
paso por tu puerta
y ni de ti ni de mí apenas,
como sombras de la vieja parra,
queda el recuerdo.
© (jpellicer)
Comentarios3
Así es, el tiempo hace que todo vuelva a su sitio, a la "normalidad" o al menos a una apariencia de normalidad..
Gracias por compartir.
Buen fin de semana!!
Ya lo decía Séneca: "... a menudo los problemas que no soluciona el hombre, los soluciona el tiempo...".
Gracias a ti por aceptar y feliz fin de semana también para ti.
Cálidas sonrisas
Hoy que pasó el tiempo,
que los años ajaron
paredes y memorias,
paso por tu puerta
y ni de ti ni de mí apenas,
como sombras de la vieja parra,
queda el recuerdo...
A veces a favor, y otras tantas en contra, pero el viento, es el mejor ayudante, para el olvido...
Hermoso poema...
UN abrazo...
Muchas gracias Genevieve_Moon por tu amable comentario con el que coincido. Celebro hayan sido de tu agrado estos versos.
Cálidas sonrisas
A veces, el recuerdo lo es todo: dar vida a la muerte, ésa es la clave. Saludos.
Es otra forma de verlo. Muchas gracias Zagreo.
Cálidas sonrisas
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