QUERIDO HERMANO

 

La mayor analogía de la humanidad y la naturaleza son nuestros hermanos los arboles,,
aquellos seres que matan a sangre fría se asemejan a aquellos que los domina la tiranía ,
acrecientan sus bolsillos con masacres de seres vivos, sin importarles acuchillan a un gran amigo
pues nuestra necedad y adormecimiento han permitido esto por tanto tiempo . 

No se nos ha puesto a pensar que nosotros también somos madera que se puede utilizar de un sinfín de maneras,
no se nos ha puesto a pensar que poseemos ideas que florean en nuestras cabezas y dependiendo nuestro fin será lo que cosechas ,

No se nos ha puesto a pensar que podemos echar un si fin de ramas y llenarlas de hojas como pensamientos sólidos tupidos de experiencias  sollozas, muchos se cobijan de estos pues les brindan protección,  les cubren del ardiente sol , ellos que aprendieron a transmutarlo en amor

Siempre están apegados a su tierra, mientras más crecen más enraízan y ésta nunca deja de suministrarlos de energía  .! Llenos de paz regocijan! Llenos con inmensa alegría ,

Lo único que no tenemos como ellos  es su enorme corazón pues siguen alimentándonos con tanta devoción ,,,,aun en estos tiempos de merecida destrucción—, amemos pues a los arboles y pidámosle perdón.

JUAN CARLOS VALLADARES