Qué extraño sortilegio
el de tu mano
franca
que acarició
mies sienes
y acarició
mi espalda
Qué rareza en tus labios
que han dejado
en los míos
el sabor de
tus besos
de imborrable destino.
Qué orfebre sentimiento
el de tus claros ojos,
gracias
hoy te digo
por ofrendar tu amor…
qué insigne despedida
en donde las palabras
no fueron
necesarias,
porque cuando
dos almas se queman
en la hoguera
las cenizas se esparcen
para volver arder.
……………………………….de mi libro “GRIETAS”
- Autor: el poeta irreverente (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 23 de septiembre de 2009 a las 10:58
- Categoría: Triste
- Lecturas: 47
Comentarios1
Wow, qe versos, qe musicalidad, me encanto.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.