Y al final, ambos al parecer nos olvidamos,
ese perfecto amor que siempre buscábamos.
Nos alejamos, sin darnos cuenta,
mientras intentábamos encontrarnos,
aunque jamás perdimos la Fe,
de q el sol brillara un día con
hermosos con rayos dorados.
Ahora, después de tanto,
nuestras almas, aún sin mirarse,
vuelven nuevamente encontrarse,
a fusionarse dentro de una que otra frase,
a sentir amor cuando nuestras voces
en una conversación logran entremezclarse.
Fue tan difícil olvidarse de todos esos secretos,
aquellos que solo entre los dos nos revelamos,
que junto a nuestros tesoros más preciados
en lo más profundo del corazón enterramos,
aunque después, dejamos olvidado el mapa,
encontramos nuevos amores y ambos huimos de casa.
Paso demasiado tiempo hasta volver saber el uno del otro
y solamente después de oírnos, renacía la extinta flor de loto.
Y sé que tal vez, nosotros no fuimos los culpables,
pero de escondernos el uno del otro
deberíamos hacernos responsables,
también de olvidarnos de aquella promesa,
de ser dos almas y corazones inseparables.
A veces escucho esas canciones que emocionada me sugerías,
inmediatamente es imposible no pensar
en aquellas palabras dulce que decías,
pues siempre recuerdo tus concejos
como mi más grande valía.
Eres la alegría que alumbra los más tristes días
y la esperanza que cube con sonrisa la melancolía,
aunque a veces me pregunto ¿sin ti yo que haría?...
Comentarios1
TODO SE PUEDE OLVIDAR, PERO HAY PROMESAS QUE SE CONVIERTEN EN LA FIRMA CHICA Y QUE SON PARTE DEL CONTRATO DE AQUELLA HERMOSA HISTORIA QUE SIEMPRE SE RECORDARA.
hermosa redaccion que me llevo a la imaginacion
C; Me gusto tu comentario!!
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