La quietud yerta se convence de su propia existenciamás siendo letargo su tiempola vejez no hay quien la detengacada día con su ocasoprimavera que fallecey en su morir abre pasoa este impetuoso invierno. Indefenso es el iniciode la decadente vidael sol no es viejo ante mil ojosni la luna llena existetrás cada albor ostentosomiles de vidas se vistencon el traje primorosovisitar la muerte en su viajepues el liño verde en su trajeguarda quietud y silencioasí mismo en su momentodel alma descansa el cuerpo. La hoja seca se desprendevida que renacermientras las entrañas/el árbol/muestra a su parecerla piel que va sucumbiendoy el rio que vuelve a creceren el fiambre que floreceenvuelto ha de renacer.
- Autor: OGUER (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 25 de abril de 2012 a las 00:41
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 10
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios1
UN FIAMBRE ES UNA CONSERVA, COMO SE CONSERVA LA VIDA
BUEN POEMA
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