Libro

Estoy, estoy detras de esta hoja, pagina del tiempo, pagina llena de nada que me pueda servir a la hora de hablar de mi pasado, el dia en que mi presente sea borrado.

Las pesadas cubiertas de este libro que amenaza cerrarse cualquier momento hoy lejos de guardar confidencia acerca de mis pecados mas oscuros o de mis virtudes mas exelsas. este libro discreto al extremo, hablará de nada a quien alguna vez le venga a preguntar; ¿cuantos amores?, ¿cuantos romances?, ¿cuantos titulos?, ¿o de cuantas cosas legalmente se adueñó?, a él cuantas vidas su salvacion le deben? o ¿de cuantas muertes la causa fué?, ¿cuantos hijos?, ¿cuantas miserias?.

Sigiloso y cruel guardian de los recuerdos este almanaque de mi ignota existencia a nadie le dará más de lo que de primera mano recibió... no sé si hoy soy notado, si insignificante minucia humana representa mi carne en este mundo. Supongo que alguien, al menos una vez al día recuerda mi existencia; languida necesidad puede que tenga yo de ello, no desepero de saberme olvidado por las masas de carne a las que alguna vez pude haber ayudado, salvado, en contados casos amado, apoyado o simplemente reconfortado con palabras nacidas del mismo nucleo de mi ser, o alguno de los que negadamente les propuse dejar de pedir mi apoyo, de los abandonados, de los sí, también despreciados por su mal proceder, de los que en su oportunidad sintieron el aniquilante poder de mis palabras, de mi mano o de mis actos.

Cruel silencio encontrarán al buscar entre las paginas de un libro que se escribió, nó para ser consultado por el morbo popular, ni tampoco para ser tomado de bandera y colgar el estandarte de "yo conocí a este buen hombre!, y me dijo alguna vez amigo"; pesadas lapidas de piel bordadas en oro que espero no dejen entrar ni al aire en el recinto done quedarán confinadas las cuitas de un hombre, el hombre que tuvo la oportunidad de hacer las cosas como supuso que fueron mejores.

libro, no digas las cosas grandiosas y buenas a quienes no quisieron creerlas cuando en vida yo las dije, libro, tampoco expliques porqué las cosas malas llegué a consumar en el afán de ya no recuerdo qué ... aunque en efecto las haya realizado, no las comentes a quienes ya no podrán saciar las ansias de someterme a su justicia. Libro, serás mi amigo discreto y mi enemigo inclemente, pues detendrás también todo intento de quien séa por venerarme.

Serás sucio compendio donde igual se escribieron mis prosaicas luchas del yó contra el yó o lujurientas y largas sesiones de arrebatado placer donde más que pasión, se llevaron a cabo canibales demostraciones con desenfreno erótico en momentos y lugares de inexistente ubicación; libro, tampoco lleves al conocimiento a quienes acerca de mis muy sensibles capacidades rieron, cuando de ternura se trató, tampoco de los varios episodios donde mi vida, al lado del camino abandonada alguien dejó... libro, me voy, algo me llama y es momento, momento de que tus hojas corran el cerrojo y finalice este espectaculo que mi vida tán simple, a mis hermanos brindó.

D.R. antología segunda 2012