Aviso que he vuelto después de muchos años ausente.
Reviso la correspondencia electrónica,
y me entero que los formularios de Hacienda
están en revisión para satisfacer al Fisco.
Ya luego se pondrán en contacto
para decirme si todo está en su sitio.
Sorbo una taza de café
pausadamente, para no perder la costumbre.
Concentro mis esfuerzos por revisar
algún tema de ciencia, otro de religión,
y escribo un poco.
Rebusco en mis recuerdos
un viejo poema que jamás me aprendí,
que jamás escuché completo,
pero que se liga a mi infancia
tranquila y sosa niñez, detrás del claustro
de la vetusta casa. Escucho una canción
que en su tiempo se liga en el recuerdo
a noches de grata bohemia y canto.
Me preparo para salir más tarde
a una reunión de trabajo para tratar
de no sé qué asuntos triviales.
Clamo a Dios esperando ser escuchado,
y entre tanto me llega la respuesta
a mi mudo clamor, hecho con la voz interior
que no se oye, solamente se siente y duele
agonizante como ya no se puede ser
más sincero en este mundo. Un fuego latente
me corre por los brazos hasta el pecho
y me inunda sin consumirme,
solamente me hace más consciente de mi propio ser,
y arde en las ascuas de mis viejas culpas.
¿Quién tendrá misericordia de mí? Solamente Dios,
y aun El se niega a responderme.
Guarda silencio, quizá por un amoroso respeto
a mi melancolía.
- Autor: Carlos Cabonaro (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 8 de mayo de 2012 a las 12:22
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 57
- Usuarios favoritos de este poema: Winda, El Hombre de la Rosa, miriam quintana
Comentarios5
las labores diarias aveces nos quieren robar la sensibilidad pero cuando somos seres de sentimientos genuinos ellos siempre emergen a la luz
Salud y paz Claudia. Gracias por tus palabras, gracias por haber tomado tu tiempo para leer este poema.
Hasta pronto.
Bellas letras, un placer
Salud y paz para ti Winda, gracias por tu tiempo, tu lectura y tu comentario.
Hasta la vista.
Hermoso poema lleno de bella prosa con ritmo y gran clase poetica.
Es un placer leerlo amigo Carlos Fernando
Saludos
Saludos mi dilecto amigo. Le agradezco el favor de su tiempo, su lectura y sus palabras de elogio. Me hubiera gustado contestarle de inmediato, pero le comento que poco antes de haber leído su comentario, tuve a bien sufrir una magulladura en los dedos de mi mano izquierda, que me dejó con la imposibilidad de digitar en el teclado de mi laptop. Gracias a Dios que ya me he restablecido suficientmente y puedo ahora sí responder a su mensaje. Mis mejores deseos para su vida y su apreciable familia.
Shalom leja (la paz sea con usted)
Genuina espiritualidad. Versos que llaman a la reflexión.
saludos
Jaime García Alvarez
Amigo Sereno, me disculpo contigo por no haber visto antes tu amable comentario. Graciar por leer lo que escribí. Te visitaré pronto en tus poemas, lo prometo. Te dejo una mano abierta y extendida desde Querétaro México. Shabat Shalom javer. (Descanso y paz, amigo)
Sublevar el alma sobre el transito de la vida se hace onírico y razonable y es en esta bella poesía, donde la melancolía que aguarde viene sedienta de tu lozanía...
que bellas letras...
Amigo orlando guevara. Muy agradecido por tu poético comentario. Un placer saludarte. Una gran distinción para mi persona que te hayas ocupado de mi poema. Shalom
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