Un día me penetraste
y no lo supe hasta
que te marchaste.
Sangré de la herida
más el tiempo
la cicatrizó.
Hoy se ve la marca
pues el agujero
ahí quedo.
Ahora entras
y sales
entras
y sales,
más ya
no hay
dolor.
Un día me penetraste
y no lo supe hasta
que te marchaste.
Sangré de la herida
más el tiempo
la cicatrizó.
Hoy se ve la marca
pues el agujero
ahí quedo.
Ahora entras
y sales
entras
y sales,
más ya
no hay
dolor.
Comentarios3
Buen poema amigo, recibe mi cordial saludo.
Gracias por el comentario un saludo de mi parte tambien.
El dolor tal vez merme , pero aquella cicatriz estará por siempre en vuestro corazón ,como una triste presea de un antiguo amor !!!
Cariños
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