LA DUEÑA DEL UNIVERSO

carminha nieves

                             

Era dueña del universo, las estrellas eran baloncitos brillantes en mano de hadas,  la luna era donde vivía el  vigilante. Era dueña de las nubes que unas veces casi paradas, otras corriendo como en un recreo de la escuela jugaban con los pájaros, el azul se creía que habían sido sus Padres que lo habían pintado, para ella. Era la princesa, tenía todo. Corriendo, bailando, riendo, ella era, un pedazo del azul del cielo.

Repentinamente, ha quedado sin nada. Las estrellas eran inaccesibles,  la luna era un pedazo de materia, las nubes echaban agua, por veces tanta que  todo llevaba, desde casas a gente. Las nubes eran empujadas por corrientes de aire, el azul era la atmosfera. Nada había de cuentos de hadas.  Sus Padres estaban  bajo tierra, sin luz, no podía hablarles ni verlos.

Llorando, pensaba en tanta familia que estaban iguales y amigos, que no podían mirar lo que un día fue su sueño.

Al recorrer la vida pensaba que era dueña de otras cosas y que haría de todo, para regalar a otra niña un universo e todos sus sueños. Por largo tiempo convencida, orgullosa, con sacrificio, intentó que  la niña sufriera lo más tarde posible la desilusión como la de ella. Nada de esto pasó, la niña caminando, no se dio cuenta de lo que hicieran por ella y al contrario, volvió a desilusionar, a aquella que pensaba que era dueña del universo.

Ahora, sin cielo azul, sin nubes corriendo, ni hadas, ni luna, ya no baila, no ríe,  y el azul del cielo, es ceniza, ya nada tiene, ya nada la ilusiona, ya nada le devuelve  la vida, que soñó un día poder tener.  

Su universo envuelto en nubes de amor y cariño, junto a ella.

Aun puede mirar, aun tiene claridad, no tiene tierra tapándola, pero su corazón lo han enterrado, aun con vida y mucho amor.

Querer es poder, si, pero si no quiere la niña, la desilusionada, nada puede hacer, a no ser  apartarse , sin que nadie se dé cuenta, de su tristeza y si puede, ir donde están sus Padres y familia e allí llorar, ellos no la escuchan, no pueden, pero ella hará de cuenta, que no esta sola.

¿Será que la dueña del universo, no tendrá por muy pequeñita que sea  le sonrisa de una estrellita al quedar dormida? Lo deseo, pues todos nosotros ya soñamos, ya fuimos niñas y vivimos  cuentos de hadas, con el pensamiento de la inocencia.

Oporto, 25 de Mayo de 2012

Carminha Nieves

 

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  • Autor: secreet50 (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 27 de mayo de 2012 a las 08:03
  • Categoría: Reflexión
  • Lecturas: 141
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Comentarios +

Comentarios1

  • carminha nieves

    Basil, gracias, por guardares algo mío.
    Saludos, con mucho cariño
    Carminha Nieves



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