Mi alma se contenta y mi cuerpo se eleva cada día, cuando muere el sol radiante y nace la noche oscura quien al mismo tiempo va dando parto una a una a todas las estrellas e impregnando de negrura aquellas motas de algodón que navegan libremente por la inmensidad del cielo, mismo cielo de la cual surge escondida entre las nubes mi hermosa Selene, siempre tan coqueta y tan tímida, tan pálida y a la vez radiante, y yo... siempre tan enamorado, elevando mi cuerpo para alcanzar el suyo, envolverlo, besar su boca... besar su rostro, besar sus ojos los cuales cada noche se ven reflejados en los míos, como anhelo y como nostalgia, anhelo de alcanzarla y nostalgia de nunca lograrlo.
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Rafael Leon
24noviembre.blogspot.com
- Autor: Junior Rafael Velazquez Leon (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 13 de junio de 2012 a las 11:40
- Categoría: Naturaleza
- Lecturas: 104
- Usuarios favoritos de este poema: miriam quintana, Trovador de Sueños ...y realidades.
Comentarios3
muy bello escrito en letras
que denotan tu nostalgia
me es placentreo leer
rtan bello paisaje
te deso muchos exitos
abrazito calido.
No es mia la nostalgia. es la del mar en su intento de besar a la luna cada noche al subir la marea. gracias por pasearte
Hermoso himno de amor, acompañando nostalgias y sentires del alma, impregnadas de bellos astros radiantes de luz.
Un gusto leer tus letras evocadoras.
Saludo
no se conforma con su reflejo
la quiere entera
locura de enamorado
un abrazo
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