Mis horas dormidas
reposando mi vida
sobre un mullido sillòn
la tele prendida
como un inùtil amigo
de mi soledad elegida
un libro a un costado
los lentes tirados
las paredes destilan
penetrante humedad
y mi mente viaja
por la inmensidad
historias de guerras
amores eternos
a veces el cielo
y otras el averno
pasan las horas
el descanso termina
los ojos se abren
y sigue la vida...
- Autor: Horacio Dressler (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 14 de junio de 2012 a las 22:42
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 63
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