Solo en mi puerto

omu



 

Pozo de penas,

barro reseco,

que aprieta el cuello,

resta respiros,

y ahogando ahorca.

Pozo de penas:

hueco vacío.

 

 

Pozo de penas;

estéril tierra,

azufre y gas,

péndulo ardiente,

más que calor:

inútil soga.

 

 

Pozo de penas

triste es tu espino,

pincha y araña,

seca una vida,

que larga sangra,

con tal fatal,

como el suicidio.

 

 

Pozo de penas,

falta de fe

es tu esperanza.

No da limosna,

nunca repara.

 

 

 

   ***   ***   ***

 

 

Truenos y lluvia,

crueles relámpagos,

viento y marea

surcan deseos.

Desnudos gestos

y ojos esquivos

paren temor,

acercan celos,

cubren de velos

la confesión;

vuelcan espanto.

 

 

Suplicio fiero

queda en la mar;

quejido es fecha

cuando el adiós

llenando el día,

sin mano está.

Sin limpio beso

ni despedida,

sin luz de amor,

sin dulce y pulcro;

blanco pañuelo.

 

 

 

Distancia existe,

en el amarre

que da garganta;

a hondas grietas

al verde moho,

de un rincón sucio.

Lejano -el áspero-

suene el engaño,

sea sudor

leve, precario,

hurten su polvo,

denle billete

para extravío.

 

 

 

Mis pies besaron;

callos abruptos

sobre adoquines.

El nudo prieto,

que se prolonga.

El llanto amargo,

cruda desdicha.

Yo vislumbré;

pozo y caída,

y fruto de ello,

nació rechazo

diome desidia,

que trenza infiel;

la incomprensión,

lana en madeja:

su desespero.

 

 

Ardo quemado;

por el rugoso

sabor mezquino

de la traición.

Al saborear

mi corazón;

la soledad

innecesaria

de almas sombrías.

 

 

La soledad

que lenta posa

cuando penetra;

denso veneno,

angustia fría,

plomiza ausencia,

donde cabían;

sonreires plenos.

 

 

La soledad

torna invisibles

todas las cosas,

cuando su manto

-ceñido al ser-

ciérnase aunado.

A la sentencia,

de un agrio ¡no!

duro y explícito;

al desamor

¡desvergonzado!

que escueto da,

cuando transmite.

 

 

Toda tormenta

llama y despierta;

ronca deriva,

madera rota,

velas hundidas.

Olas amargas

que arrasan costas,

dejando secos,

por mil sollozos;

los ojos de hombres,

luz de mujeres.

 

 

 

Sueños quebrados

dejan la playa,

sucia de restos;

vidrios con filo,

verbos punzantes,

gritos negándose

a ser sonidos,

voces cansadas,

golpes, despecho,

nubes en alba,

gallos dormidos.

 

 

 

 

Sueños maltrechos,

dan vuelta y giran,

las que antes eran;

alegres caras.

Herida

       ilusión,

llenas de espaldas,

amplias orillas,

cedes a un rastro,

huérfano, vil,

manchas la arena;

con sed voraz,

con sal de lágrimas

y ardua desdicha.

 

 

 

Señal extiende,

desilusión,

tanto dolor,

que años se acortan.

Sumo dolor

rasga la piel,

corta y estría.

-tan suave fue-

y ya decae,

pálida y mustia.

Entre silencios

débiles, lánguidos,

cuales tomaron

la voz de arrugas.

 

 

318-omu G.S. (Bcn-2012)

 

 

 

 

  • Autor: omu (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 25 de junio de 2012 a las 15:46
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 98
  • Usuarios favoritos de este poema: Maria Hodunok.
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios1

  • Maria Hodunok.

    ESPECTACULARES PALABRAS, MUY BIEN ESCRITAS, LLEVAN TANTO DOLOR, QUE LASTIMA EL ALMA. REALMENTE ES DIFERENTE A LOS DEMAS. ME GUSTO MUCHISIMO.



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.