CAPÍTULO 1. El sueño de una niña huérfana
Esta es la historia de Alicia, una niña nacida en una familia numerosa; ella era la séptima de nueve hermanos, siete hembras y dos varones. Su madre era su adoración, el respeto y el cariño hacia ella fueron siempre emblemas de su vida. Emblemas estos que mantuvo hasta el día de su muerte. A su padre no lo recordaba, él había fallecido siendo ella apenas una niña de menos de tres años.
Cuentan que su padre había sido un eminente curandero, que de forma efectiva atendía a los enfermos del pueblo, su entrega al bienestar de los demás con inmensa filantropía que demostraba siempre, le hacía olvidarse hasta de su propia salud. Esa fue por cierto, la razón de su muerte, salir en una noche lluviosa para atender un paciente que estaba en emergencia, aún a riesgo de su propia salud, ya que estaba convaleciente de un estado febril. Esa fue su última travesía.
Ese acto de atrevimiento fue suficiente para que la muerte se hiciera presente, no en el paciente quien logró salvarse, sino en él mismo, quien falleció días después dejando a una viuda desamparada en un estado deplorable y con nueve hijos todos menores de edad.
Alicia, conocía esa historia de boca de su madre, la cual le hacía sentirse orgullosa de su padre y la unía más a su madre, quién supo con valentía enfrentar ese duro revés que la vida le había presentado.
Quizás a mucha gente no le llame la atención escribir un libro, menos aún si su nivel de instrucción es apenas de tercer grado de educación básica; puede decirse que Alicia era una excepción de la regla, pues ella soñaba con escribir un libro autobiográfico que recogiera las reseñas de su vida con todos sus detalles, ¡quién mejor que yo puede saber lo que viví? Solía preguntarse. Por eso es que soñaba con hacerlo algún día cuando llegara a la ancianidad, claro, si Dios le permitía mantener su memoria y un estado de lucidez suficiente para poder recordar dichas historias.
En su mente navegaba la idea de escribir su libro, y ella como alegre navegante se lanzó a las profundidades del mar donde las ideas fluyen convertidas en sueños…Allí, en ese mar de sueños, Alicia empujaba su velero; y poniendo el alma en su travesía se había propuesto a no dejarlo naufragar.
Alicia quería un libro escribir
para contar sus vivencias,
era mucho lo que tenía que decir,
porque era mucha su experiencia.
Continuará...
- Autor: Diaz Valero Alejandro José ( Offline)
- Publicado: 28 de junio de 2012 a las 00:18
- Categoría: Familia
- Lecturas: 62
- Usuarios favoritos de este poema: AmandaAckermann, isapoema, Maria Hodunok., JADE FENIX, Diluz, la negra rodriguez, linda abdul baki, Violeta
Comentarios13
Ese sueño de Alicia....creo que es el sueño de muchos...ojalá pueda llegar a compartir su vivencias con los demás, es la mejor manera de aprender.....
Hola Amanda... Bueno ya veremos, apenas la historia comienza.
Un abrazo!
Estaré atenta a tu historia....Un abrazo.
Interesante historia que ahora nos traes mi estimado Alejandro. En espera del siguiente.
Abrazos
Jajajaj asi es amiga, una odisea que durará diez días... Espero no cansarte. Un abrazo!!!
Nueva historia, nuevos capítulos interrogante espera.
Y complacida de leerte
Saludos
Vaya que sí, historias que surgen de manera natural y que van dejando parte de las experiencias de vida.
Saludos amiga mía!!!
bueno,llego justo a tiempo
para empezar tu historia,que me da,que tendrá mucho de real
un abrazo
Hola amigo Ramón. Pues sí este trabajo literario es un homenaje póstumo a mi tía, quien dedicó parte de su vida a mi crianza y quien al igual que yo tuvo sueños literarios.
Saludos amigo, un gusto inmenso compartr contigo esta historia de mi familia, la cual incluso, asi la clasifiqué en la publicación.
Nos vemos!!!!!
Estaré atenta a la historia que nos regalas...y quizá en ella encuentre similitudes con la vida de personajes que a diario caminan en derredor. Eres estupendo!
Gracias Lissi, mi amiga profesora, y mi profesora amiga... Historias pueblerinas que buyen en nuestros recuerdos y que poco a poco se escapan a tráves de nuestros ecritos para dejar constancia de su pasado.
Un abrazo efusivo amiga mía!!!
Intrigada por el próximo capítulo me despido.
Un saludo.
Tranquila amiga es una historia pueblrina donde no habrá mucho suspenso... Bueno, eso creo!
MUY BUENA TU HISTORIA Y SI, PUEDE ESCRIBIR UN LIBRO CON SUS VIVENCIAS, PORQUE LAS LETRAS SALEN DEL ALMA, NO INTERESA LA INSTRUCCION. cariñitos.
Asi es amiga María, esas letras auténticamente salidad del alma podrían hacer ese libro y muchos más.
Un abrazo!
El querer es poder, sobre todo cuando están puestas las ganas, las fuerzas, como las de Alicia.
Te sigo amigo.
un abrazo.
Bueno amiga nos vemos en la próxima entrega, ya los capítulos están escritos en su totalidad, asi que como de costumbre, nada cambiará... Tal cual fue concebido desde el inicio de la historia.
Un abrazo!
Triste y profunda historia nos traes hoy Alejandro,....la lucha por la supervivencia de Alicia,...teniendo de compañía la fortaleza de su espíritu,...continuemos con la historia,....un cálido abrazo,..amigo.
Muy poético tu cometario amiga Gio, gracias de corazón te doy por ello.
Un abrazo!
aqui el primer capitulo presente
Alicia quería un libro escribir
para contar sus vivencias,
era mucho lo que tenía que decir,
porque era mucha su experiencia.
con mi cari;o
Gracias amiga por esa manera de identificarte con la historia.
Un abrazo.
eS UNA BELLA HISTORIA Q+LA QUE EMPIEZO DESDE HOY A LEER, VALINETE PERSONAJE NOS TRAES.
BESOS.
Saludos amiga Negra... Mujeres de nuestros puebles decididas y valientes.
Saludos!
Aquí regrese a releer el primer capitulo
Porque es una historia real y todo lo que es real, en mi caso se aprecia más que la fantasía
Porque ahí se presenta la persona que vivió lucho y muchos la conocieron y queda como un ejemplo viviente
Seguimos en la lectura
Gracias Linda por ese bello detalle... Ojalá y en el devenir de los próximos capitulos puedas identificarte con muchas de las vivencias de Alicia, la protagonista de mi historia.
Un abrazo!
ME PIERDO POR UNOS DÍAS Y MIRA CON QUE TE ENCUENTRO .....
Jajajajaj asi son las cosas amiga, a veces el sentimiento nos marca la trilla.
Dios te bendiga!
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