Un Doctor muy joven pero con grande riqueza
le decía a un colega que ya había envejecido:
¡¿"por qué vives en esta pobreza,
y pasas inadvertido"?!
"Deberías tener un barco,
y dos carrazos del año;
el que tienes se hace daño
nomas con cruzar un charco".
"No tienes amigos de la alta;
¡tú sabes que es muy necesario!;
veo que aquí todo te falta,
¿no te enfada vivir así a diario?
¡En eso llegó una mujer
con su bebé en un grito!;
y cumpliendo con su deber,
atendió al pobre niñito.
La mujer agradecida puso al niñito en la cuna
y le ofreció al Doctor, tres de sus gordas gallinas;
pero el doctor le dijo:"solo entrégame una,
las otras dos, al niño se las cocinas"
El doctor joven en años ya no pudo decir nada
tan solo se levantó y se fué en su limosina;
¡Lo que se perdió:Una fresca limonada,
y un buen caldo de gallina!
Autor:Bernardo Arzate
- Autor: Bernardo Arzate Benítez ( Offline)
- Publicado: 11 de julio de 2012 a las 09:49
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 76
- Usuarios favoritos de este poema: akuanauta
Comentarios1
Profunda reflexión con muy buena rima, he llegado a la conclusión, con esto que has traído, que los ricos no saben apreciar el verdadero sentimiento de gratificación y que seguro que ese viejo hombre era más rico en el fondo que el de la limusina.
Abrazos.
Gracias por tu comentario;en realidad,ese fue el propósito,hacer resaltar una verdad expresada bíblicamente que dice:
(Hechos 20:35) En todas las cosas les he exhibido que por medio de laborar así tienen que prestar ayuda a los que son débiles, y tienen que tener presentes las palabras del Señor Jesús, cuando él mismo dijo: ‘Hay más felicidad en dar que en recibir’”. . .
Que tengas buen día.
Pues está muy bien representada esa cita, felicidades.
Un buen día te ampare a ti también.
Abrazos.
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