Yo no podría ya decirte cosas bellas,
podría si enseñartelas lo saber.
esto ha pertenecido desde siempre a todos,
Tú eres esto sin Mí...
pisa el viento con tu pelo
sumerge la piel de tu risa en el arroyo
que fluye presuroso en mis manos
y se pierde en el oeste, dónde gimen un vistazo
los bebés ocasos.
huele de era flor los utersos tonos de la montaña virgen.
mirate, mira la premura de esos labios:
son un par de remansos dormidos en el facial valle
dos remansos que se juntan mientras crean un lugar
para la Vida.
vaya..., si pudiera fluir la palabra como fluyen los arroyos,
si en los besos pudiera Yo obtener el perdón de los Dioses,
si el interior se abriera saludable a todas las desenbocaduras humanas...
cabrían allí tres cosas quizás;
tres aves, tres cardos, tres caídas, tres lágrimas...
poco sí,
pero te aseguro que por allí podría vagar la niebla
y aletear el águila,
te aseguro que por allí podría nadar de vez en cuando mí paz
y volar errabunda la emoción.
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Autor:
Isaac Amenemope (
Offline) - Publicado: 1 de agosto de 2012 a las 00:08
- Categoría: Amor
- Lecturas: 94
- Usuarios favoritos de este poema: Marellia
Offline)
Comentarios1
Que lindo encontrarte, verte así, feliz, rodeado de tus afectos, descubriendo en lo profundo de tus letras tu maravilloso sentir .
Un beso de Luz infinita.
te quiero Guardián
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