Por un collar... la muerte

Hugo Emilio Ocanto

Nuevamente he venido

a visitarte mi Señor.

A sentirme acompañado

de Vós. Hace varios días

que no me acercaba

a tí, personalmente.

Sabes que siempre

estás en mi corazón.

No quiero que pienses

que sólo cuando te necesito

acudo a pedirte.

Hoy quiero encontrar paz

estando contigo.

Es muy difícil

hallarla fuera de

tu Casa. El templo

del amor. De la

serenidad...

Aquí venimos los que

algo en nuestro

interior sucede.

Al menos, a mí me

está sucediendo.

No quiero llorar.

Quiero confesarme

ante Vós mi Señor.

Confesarte mi...

delito. Me siento cansado,

abatido, temeroso...

culpable. Me siento

un ladrón sin salida.

No quisiera estar en

el exterior de esta

iglesia.

Hoy............

--Buenos días, señorita.

¿Cómo está usted?.

Mucho me alegro.

Quisiera me muestre

ese collar que está

en vidriera. Ese...

Es hermoso...

Valdrá una fortuna,¿no?

Podrían ponerle precio.

¡Qué barbaridad!...

tres mil pesos...

no creí saliera tanto...

¿Lo puedo financiar?

Sí, con tarjeta.

Oh, me siento un

poco mareado...

¿Me daría un vaso de agua?

.....................

Entonces Señor,

en ese momento

salí corriendo

sin saber dónde

llegar... y aquí estoy...

contándotelo, y avergonzado

por mi actitud...

Estoy... perdido...

No sé si volver,

y devolver el collar...

No me animo...

ahora tengo  miedo, pánico...

de ser arrestado.

Una vez más Dios...

No, no quiero

que eso me suceda...

Soy un cobarde,¿verdad?

Esos, tus ojos...

Los ojos del amor...

¿Por qué el mundo,

nosotros, no tenemos

presente tus ojos

en nuestra vida?.

Tus mandamientos...

No robarás...

y yo hoy lo he hecho...

¿Me dices que lo devuelva?

Tantas deudas podría pagar...

Tienes razón... perdóname...

Juntaré coraje y valentía,

y lo devolveré...

Mi pena será más leve...

Oh, Señor, perdona,

déjame desahogarme,

déjame llorar...

déjame llorar...

Me arrepiento de

lo que hice...

No es tarde,¿verdad?...

Ahí entraron...

son ellos... vienen a buscarme...

¿qué hago Dios?...

Me encomiendo a tí...

......

No, están equivocados,

no soy la persona

que buscan...

(Dios, estoy mintiendo

delante tuyo...)

Es un error, no tengo

ningún collar...

(No puedo entregarlo

Señor... este collar

salvará mi vida,

no puedo)

¡No! ¡Están equivocados!...

¡No lo tengo!...

¡Debo ser parecido

al ladrón!...

(Corre por la iglesia

hasta la puerta,

llega a la escalera

que da a la calle,

y recibe dos balazos

en la espalda,

rueda por los peldaños,

y su cuerpo cae inerte

a la vereda)

Todos los derechos reservados al autor(Hugo Emilio Ocanto-02/08/2012)

 

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Comentarios +

Comentarios11

  • Alejandro O. de Leon Soto

    Me encanta como abordas tus monólogos., y que de la nada sacas tus personajes que por si te quedan a la perfección....SALUDOS HERMANO

    • Hugo Emilio Ocanto

      Me consientes con tus comentarios, y me alegra. Gracias Alejandro. Un abrazo: Hugo

    • luna de hielo

      Gran reflexión tu relato Hugo

      el dejarse llevar por la desesperación de los problemas que te aquejan, suele llevarnos a caminos espinosos y desconocidos que pueden terminar en este triste final!

      saludos, ha sido un gusto leerte

      • Hugo Emilio Ocanto

        Un final imprevisto. Es el destino. Gracias por leer y comentar luna. Saludos: Hugo

      • NM de la Rosa

        Y cuántas veces no pasa eso? Hombres, padres de familia, sin empleo, la desesperación les gana y llegan a cometer un delito. Y bueno un triste final de tu poema amiga, pero muy bueno!!!

        Abrazos

        • Hugo Emilio Ocanto

          He conocido casos similares y reales. Este, es ficción. Gracias por tu comentario NM. Un abrazo : Hugo

        • Miguel Font

          Solamente de un interior con mucha riqueza pueden salir estos versos con tanta variedad de sentimientos.Lectura atrapante...felicitaciones !!

          • Hugo Emilio Ocanto

            Te estoy muy agradecido por tu comentario Miguel. Muy amable de tu parte. Saludos: Hugo

          • Poemas de Pepita Fernández

            AY!!!QUE DESESPERANTE, POBRE HOMBRE !!!!!menos mal que acudió con su pecado a Dios ....
            HERMOSO , hugo emilio
            un beso

            • Hugo Emilio Ocanto

              Sí Pepita, acudió para su bienestar, y sin pensarlo, encontró la muerte. Hubiese hecho otro final, pero la muerte estuvo más cerca de mi interior. Fijate que la foto del poema es Nuestra Basílica de Guadalupe. Un beso Pepita y mi gran aprecio: Hugo

            • elvira olivares

              Hugo muy lindo diálogo entre Dios y este hombre
              sorprendido por el pecado.
              Un saludo para tí.

            • CARMEN

              Una gran historia contada en bellos versos. Un placer pasar por tu espacio . Un beso

              • Hugo Emilio Ocanto

                Muchas gracias Carmen por comentario. Sós una poeta de diez puntos. Un beso: Hugo

              • Maria Hodunok.

                muy buen monologo amigo, muy real, bien escrito,
                sos un genio en este rubro tan dificil.

                CARIÑITOS DEL ALMA.

              • Nilo Arturo

                Sos especialista para hablar solo, jajajajaj, excelente amigo, te salvó la vida.

                • Hugo Emilio Ocanto

                  Gracias Nilo por reponder con esa jocosidad tan especial

                • YUBISAY MORALES.G.

                  Lindo poema amigo,me llegó al corazón,un abrazo.

                • El Hombre de la Rosa

                  Una bella y hermosa historia en prosa poetica y verso libre encadenado.
                  Genial amigo Hugo
                  Saludos de amistad

                  • Hugo Emilio Ocanto

                    Muchas gracias por tu comentario poeta. Saludos.



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