Te necesito tanto, necesito esa sensación del beso siempre deseado y nunca alcanzado. Necesito esa sensación de deseo despertado por la palabra, la que siente una hoja cuando al caer lentamente y balanceada por el viento puede ver que es capaz de volar, que nunca va a caer y que puede abarcar todos los espacios con el aleteo de una mariposa artificial. Te necesito, necesito el recuerdo del calor de tu abrazo, ese calor que recorre el cuerpo de solo pensar el tan esperado roce de piel, pero que sólo queda en la imaginación, como esa sensación que te da el rayo del sol naciente, que te toca, que te envuelve, lleno de una vida inexistente. Te necesito, necesito el hilo sideral de tu mirada, mirada siempre imaginada, con un brillo que mi pensamiento abarcaba y mi alma llenaba. Mirada que leia en cada letra escrita, en cada imagen dibujada, la ansiedad que tiene una mujer enamorada. Te necesito, necesito el recuerdo de tus piezas, de cada uno de tus pedazos, que en mi andar voy construyendo para ver si con ellos armo un ser concreto del recuerdo. Te necesito, te necesito tanto para ver... Si puedo seguir andando
- Autor: Rosa de Terciopelo ( Offline)
- Publicado: 30 de agosto de 2012 a las 06:21
- Comentario del autor sobre el poema: Aunque no lo creas, ya no te necesito tanto. Ver como actuas lo ha hecho más fácil. Sigue haciéndolo
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 81
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, ADOLFO CESAR MARCELLO, Winda, Edi Magallanes poeta sentimental, Angst, nelida anderson parini
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