Te regalaré el sol naciente, en copa de rocío diamantino... Y la luna del cuarto creciente colgaré de tu cuello con cadena de eslabones plateados robados a la vía láctea... te enseñaré la danza frenética del Río al pasar magestuoso el Cañón del Chicamocha, en su eterno juntar su azul con el del Mar... Y la suave tonada del Arroyo cantarín que serpentea entre perfume de violetas y aromas de poleo coqueteándole a la Ladera de la Cruz., mientras rompe en incontables destellos, el retrato de las nubes que coronan la Montaña; Aquel arroyo que esculpió en mi espíritu infantil ¡tantos! versos para Oreida. Te regalaré un sueño, que de cuando en vez harás realidad... harás realidad de vez en cuando... Y,si aún faltara lgún ddtalle, lo hallaré en la misma quinta eternidad... Todo así, para que recobres tus palabras... Una a una, todas tus palabras, las flores de tu voz las que perfuman mis fantasías... Para que de los pétalos encendidos de tu boca cual si reventara la primera Rosa en primavera... Brote la palabra...Sí...Y
- Autor: Universo Azul. (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 11 de septiembre de 2012 a las 01:37
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 48
- Usuarios favoritos de este poema: Gloria Eugenia
Comentarios3
Gracias,buena noche,ó,buen dia?
Intenso poema, con sublime verbo. Un gusto leer. Excelente...!!!
Bienvenido...
Saludos fraternos...
Oh. Interesante.
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