LA NIÑA, DE LA ONCE

He ido a tomar un café
Y de pronto  te he visto Y he sentido un placer
Al ver tu cutis explosivo
Tienes una sonrisa divina
Una mirada que me cautiva
Tus labios son una golosina Que quisiera probar, mi diva
Eres como un hada encantada Que me das buenas sensaciones
Si tu fueses mi musa y amada
Te Regalaría mil ilusiones
Un hotel con tu nombre destellando,
Pues eres un sueño de carne y hueso
Una flor del jardín encantado
Una mariposa que acciona mi embeleso,
Tuyo quisiera ser, mi dulce Paloma
Tu vuelo embriaga mis placeres
Y despierta sin querer mi diploma
En los estudios del buen querer
 
Te quiero para mi, flor de alelí
Pero es un deseo imposible,
Eres más dulce que un pirulí
Y tienes un precioso semblante
Este piropo es real mi paloma
Al verte esta mañana, musa mía,
He subido de golpe a la luna
Y he visto al sol, en tu anatomía
¿Quien soy yo, para quererte?
Si eres de otro hombre, mujer
Del que siento celos, al verte
Amazona y flor, del dulce querer
Dicen que soñar es gratis
Y eso eres tú para mí,
Un sueño real e imposible,
Una ternura en carmesí
 
Que floreces en mi jardín
De margaritas y azucenas
Sueños vivos, un violín
De calidades inmensas.
Tus ojos son un diamante
Tus boca un dulce de almíbar
Golosina que acaricia mi mente,
En ti veo la suerte, de mi soñar
Envuelta en euros crucigrama,
Donde hay que adivinar mi niña
Que tu regalas el rico dilema
Y quizás un día me toque, tu mina. 
Le das premios a quien te saluda
Pero yo quisiera de ti el gozo,
Para soñar sin ninguna duda
Cuando de verdad, me des el  gordo

                        Modesto Ruiz Martínez / miercoles, 12 de septiembre de 2012                                                         (Enviado desde mi ipad)