Siempre tan distante,
Tan cerca,
Tan falso y tan correcto.
Siempre tan divertido y delicado,
Tan tímido y mundano.
Siempre tan libre y atado,
Tan artificial y natural,
Siempre tan orgulloso y humano,
Con la maldad en tus manos y
En tu pelo castaño.
Tu cuerpo lejano a mi alma deja delirando,
Dulce locura profana en tu piel,
Callo mirando tus labios,
Disfrutando el vuelco en mi corazón,
Siempre perdiéndome en tus ojos,
Y así como siempre voy perdonando cada
Una de tus desaliñadas debilidades,
Potenciales fallas que a mi alma matan.
Bellos rasgos que a mi voluntad atacan,
Y mi respiración atrapan.
Me voy alejando de ti con la luna llena en su fin,
Tus ojos en mí y como siempre me quedo atada a ti.
- Autor: Dulce condena (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 19 de septiembre de 2012 a las 20:13
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 129
- Usuarios favoritos de este poema: DAVID FERNANDEZ FIS
Comentarios1
Muy Bueno
Saludos..
Muchas gracias amigo
me agrada saber que mis letras son
de tu agrado...Saludos
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