La tarde tormentosa y fría,
Lentamente con su manto nos cubría,
Mientras la nieve, con su gélido
Abrazo nos cubría.
Y del olvido su huella,
Pasaba junto a la flor triste y bella,
Esperando la venida de mi doncella,
Dirigida por la brillante estrella.
Trayendo tus rayos de luz que calma,
Que vienes a alumbrar la soledad de mi alma,
Llegando a mí el destello de tus ojos celestiales,
Que roban la luz de las auroras boreales.
Trayendo al corazón alegría,
Iluminando mi triste vida sombría,
Siendo tú, la paz de mi abadía,
La protagonista de mis fantasías.
Eres tú la divina presencia,
Alegras mi mundo y mi existencia,
Mi ángel de desvelo e ilusión,
A quien amo, la dueña de mi corazón.
“Tu amor sobre mí derramas, controlas mi pensamiento, eres mi adoración, iluminas el firmamento tienes en tus manos mi corazón.”
- Autor: Geovani ( Offline)
- Publicado: 26 de octubre de 2009 a las 00:36
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 294
Comentarios4
Bello rayo de luz,
me encantó
saludos
abrazo
exelente tu poema gracias por compartir tan bellos poemas y que dios te bendiga, si puedes visita los mios gracias
jose
wow q buen poema...bellisimo....abrazos
Muy bello poema. Felicitaciones. Hace un tiempo un amigo poeta me dijo, "eres esclavo de las rimas, cuando te libres de ello escribirás mejor aún". Saca tus propias conclusiones.
Un abrazo. Ruben.
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