DUELE

Te extraño y quise escribirte para sentirte por lo menos en mis hojas… No sé si alguna vez realmente te tuve a mi lado pero me hacías sentir feliz con el poco amor que me dabas… Sabíamos que nosotros no llegábamos a nada juntos pero me arr iesgue a quererte. No sé si decir que haberte dado la oportunidad que tanto buscaste fue bueno o malo, porque a pesar de que es una historia muy gris también tiene muchos buenos momentos… Y te confieso que hasta la última vez que te vi me causaste una sensación rara en la panza, como cosquillas… No sé si soy culpable o no de que te alejaras de mi lado, de que perdieras todo el interés que tenías sobre mí, pero por lo menos te voy a pedir perdón por todas las veces en las que te desprecie, si pudiera volver a conocerte e intentar de nuevo te juro que lo haría… Hoy en día no te tengo en mis brazos y tampoco te tengo cerca, tampoco puedo contestarme exactamente porque te fuiste, si fue porque te cansaste de que te rechazara o realmente nunca sentiste nada por mí… No voy a cambiar mi forma de ser, esa que tanto te gustaba y la que te “conquistó” hace muchos años, pero la próxima vez que quiera a alguien voy a cambiar mis actitudes desastrosas… Todo lo que no te demostré en este tiempo te lo voy a dejar en esta carta, porque cuando te tengo de frente no me salen este tipo de palabras… Cargo con algunas cuotas de culpa por ser tan fría pero detrás de eso se esconde una verdad, y es que tenía miedo, sé cómo eres: “Las mujeres pueden tocarte todo, menos el corazón”, porque siempre terminas lastimando… Y tenía miedo de que me lastimaras. Fui tan fría porque no quería perder contra vos, sin darme cuenta de que cuando no le demostrás un poco de amor a la persona que tienes al lado, es cuando más la estás perdiendo… cuando alguien no te quiere, ¿te alejas verdad? Escuché decir de tu boca que “nunca te quise”, para mí fue doloroso, sólo me resguardaba que no me lastimaras. Te quise y mucho, pero como nunca lo pudiste ver, nunca sirvió… Mi mayor miedo era quererte y que vos me cambiaras por otra persona, y así pasó, empezaste por confundirte entre ella y yo… Eso marchitó mis ganas de seguir con vos, pero todavía el amor que nunca te di no se marchita… Nunca te reclamé nada por el simple hecho de no demostrarte sentimientos o de no verme débil pero por dentro sentía que el alma me ardía, y así me estuve quemando por mucho tiempo… A veces sentía que jugabas conmigo cuando me llamabas 30 veces, me dejabas 15 mensajes y me salías a buscar y al otro día pasaba de desapercibida pero yo creo que algo me quisiste, me buscaste hasta conseguirme y una vez que me tuviste me lastimaste, pero no me dejabas partir... Si alguna vez me tratarían como yo lo hice con vos, creo que no aguantaría ni un segundo, ¿Pero sabes qué? Así reaccionamos algunas personas cuando algo nos duele o nos enoja y durante este tiempo me estuviste causando mucho enojo y dolor… Que la relación se desmoronara me daño tanto porque tú me habías creado falsas ilusiones, pensé que ibas a ser vos quien tanto me iba a querer... Y me sigo preguntando: ¿Para qué me retuviste tanto? Si sabía que eras así no lo hubiera permitido… Pero fuiste vos el que te cansaste de mi orgullo y decidiste partir. Tenemos tantas diferencias que pareciera mentira, antes morías por mi y ahora yo soy la que se muere por ti… Ya sé cómo me tengo que levantar cuando me caigo por amor, pero nunca pensé que ibas a ser vos el que me iba a dejar caer… No sé si con tu nueva persona estas bien o mal, pero te prometo que no vuelvo a llorar, sé lo felices que están y por el momento las cosas están así, quizás es la emoción inicial y por más de que me seguiste buscando fui yo la que decidí emprender otro camino… Lo más triste de todo es que yo nunca me “confundí” con alguien más, siempre te elegí a ti… Te odio porque te llevaste con vos la mitad de mi corazón y te quiero por dos motivos, uno porque sos el único que hizo tantas locuras por mi y dos que me ayudaste a descubrir como soy realmente: más frágil y sensible de lo que creía y muy orgullosa… Voy a ponerle fin a mis palabras diciendo dos cosas, voy a perdonarte y me voy a perdonar para poder olvidar...