INRI

Ernesto Spinosa

Arrastro sobre mi espalda flagelada

la pesada cruz del desamor,

las burlas injustificadas de la indiferencia,

la lástima impotente de la ilusión.

 

La corona de espinas en mi frente,

de las espinas de las rosas que te envié;

son ahora mi peor humillación,

mi condena a muerte, a mi soledad.

 

Pero te perdono, tengo grande el corazón,

tú fuiste el milagro que me tentó a pecar.

Ahora vete, déjame en paz, o dame un beso

que me de la salvación, la resurrección.

  • Autor: Ernesto Spinosa (Offline Offline)
  • Publicado: 19 de noviembre de 2012 a las 20:18
  • Categoría: Amor
  • Lecturas: 72
  • Usuarios favoritos de este poema: Cock
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Comentarios +

Comentarios2

  • claufer

    Bonitas letras mi estimado.





    • Ernesto Spinosa

      Gracias, un saludo desde Colombia.

    • Armando Solarte

      Excelente poema, muy profundo. Éxitos amigo.

      • Ernesto Spinosa

        Gracias, un saludo fraterno.



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