Siempre pasa que alguien guarda una foto como estampilla del siglo cien.
Te estoy buscando en la letanía del fijo cortocircuito del amanecer.
Quisiera darte un abrazo de bienvenida y no podré verte por cien siglos tal vez.
Estoy viendo al cazador en la laguna de los discursos aturdidos, fijar su escopeta al firmamento y lanzar su balacera a una bandada de suplicas.
Quisiera darte un fuerte abrazo ya solo me queda ver tu firme imagen cien siglos más.
Ya vienen a mi cien latigazos con aroma a ron.
Ya vienen a mi garganta el sabor de los pactos preexistentes…
Vivir de cualquier modo sin medir la prudencia después de los 40.
En cada tramo de esta vía hay más de cien que se despiertan mirando la vía…
Siempre pasa, no puedo obedecerme y hay días que estoy misteriosamente bien.
Quisiera despedirme de ti, soy un avestruz escondiéndome de la razón supeditada.
Desgajo los sueños de volvernos a ver cada vez que echo cenizas a mis plantas.
- Autor: Carlos Casagemas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de noviembre de 2012 a las 07:24
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 99
- Usuarios favoritos de este poema: gallicida, El Hombre de la Rosa
Comentarios3
se nota que lo echas de menos...
Hermosa y bella prosa has escrito amigo Carlos
Un estimulante placer leer tus letras
Saludos de sincera amistad
Disparador de recuerdos que nos llevan a lamentar la pérdida, y si pasan cien, mil, el dolor se queda allí... El tiempo es ¡tan relativo! cuando hay extrañeza....
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.