**-Sexo y religión-**

Eduardo González Cuartango

Sexo y religión

 

 

 

 

Parecen mis encuentros amorosos

las notas repetidas de aquel piano

que oíamos felices y dichosos

de novios en aquel tiempo lejano,

en aquellos momentos tan dichosos

 

tus besos que encendían mis deseos

ahora ni los cato ni los quiero,

crecían mi pasión y mis jadeos

tocando con mis dedos tu ligero

llegar a tus braguitas… tu mosqueo.

 

Cuando antes ante mí te desnudabas

retándome a tomarte y poseerte

haciendote el amor ni murmurabas

tampoco te movías, tú inerte

a tu cuerpo gozar no le dejabas

 

-¡Tú solo métela y acaba pronto!

han sido tus palabras más ardientes

y piensas que disfruto como un tonto

calmando mis deseos más calientes

sin hacer el amor cuando te monto.

 

Tu sexo es una puerta del infierno

y para procrear solo ha de usarse

si gozas arderás en el averno

después de follar ¡hay que confesarse

no vayas a parar al fuego eterno

 

que el sexo con placer es un pecado!

La cruel hipocresía religiosa

que la sexualidad nos ha castrado

cambiándola por oración piadosa

¡sus traumas y vergüenzas han ganado!

 

 

 

 

 

©   Eduardo González Cuartango

06/12/2012 21:43:00

Ver métrica de este poema
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios2

  • PoemasDeLaSu

    No estás errado, la religión y el sexo, paradójicamente, tienen mucho que ver, hay varios análisis al respecto
    Un abrazo

    • Eduardo González Cuartango

      Durante siglos la religión, en su afán por controlar al individuo, nos ha negado los placeres de la carne, pretendiendo enseñarnos que ese acto "animal" es simplemente para reproducirnos. Siguen montados en sus patrañas, por más que cada día les sigan menos personas.

      Un abrazo.

    • LORRAINE0826

      Dos polos tan opuestos y a la vez tan unidos por el amor a la hora de sentirse.
      Lo describes con tal sensación que solo te digo buena poema¡¡
      Saludos



    Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.