Quemarse con el amor
No me seas zalamera
que a tu amor no me resisto
y por dármelas de listo
me cazaste a la primera.
Tú eras solo una quimera
yo con poco mundo visto
de malicias desprovisto
y tú ya eras una fiera
yo un tímido ratoncillo
entre tus garras de gata
y era apenas un chiquillo
Tu ardiente piel de mulata
me deslumbró con su brillo
encendiendo mi fogata.
Con el fuego nos quemamos
de tanto como jugamos,
dejamos de ser chiquillos
y mucho más nos amamos.
© Eduardo González Cuartango
20/12/2012 12:55:00
- Autor: Eduardo González Cuartango ( Offline)
- Publicado: 20 de diciembre de 2012 a las 10:49
- Comentario del autor sobre el poema: Sonetillo con estrambote.
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 185
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Un bello y hermoso sonetillo amigo Eduardo
Un placer leer y escuchar sus versos
Saludos de amistad y afecto
Críspulo
Gracias, amigo Críspulo.
Un abrazo.
Jajajaja...me encantó lo de "zalamera", yo suelo usar esa palabra, pensé que estaba cayendo en desuso, porque nunca la escucho.
Es una pena perder esos vocablos que hace tiempo tan vigentes estuvieron.
Un abrazo.
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