EPÍLOGO

arturo maldonador

Esta noche, estoy de fiesta, 

vine a contemplar tu regalo,

tan hermoso jardín,

con lunas que me asombran.


El búho transita entre ellas,

en tu íntima oscuridad,

sedosa, húmeda, abrigante,

que me atrapa entre ellas, 

si tu permites que viaje hacia el Edén.  


Inconcluso.

Vacío porque no hay respuesta.  


Lo continúo en otro tiempo,

del mismo tiempo, presente eterno,

el misterio de cada uno,

permanece desconocido,

tan difícil darnos cuenta de ello.  


Vivimos un silencio verbal,

sin embargo, cada día platicamos,

recordamos palabras e imágenes.

 

Cuando una mariposa sale del cocón, 

jamás regresa a el.

Ese sitio, la transforma, 

vivió su propia metamorfosis.  


Algo similar vivimos,

de crisálidas a mariposas.

Quise preguntarme muchas cosas, 

del antes, del momento, 

del silencio del después.  


Nada tiene respuesta,

de semilla a botón y flor, 

como un destino inescrutable,

que sucede, que tiene que pasar.  


En el vuelo por el mundo,

en el andar por la senda,

que cada quien sigue la suya,

nuestros ecos, en palabras,

si alguna vez leemos,

los cantos del corazón de los poetas.  


Y en nuestra soledad interior, 

cuando le dejemos un espacio,

al recuerdo del momento, tan luminoso,

que sólo cada quien lo percibe y siente,

el hilito invisible vibrará,

porque en el Universo, 

todo permanece entrelazado,

en la eternidad.  


Ya conociste, la imagen del poeta,

normalmente no uso lentes,

no quisiera usarlos, 

me impiden verme a mi mismo.  


El lugar, muy al caso,

es el atrio de una iglesia,

sitio solitario y silencioso,

del pueblo de Pátzcuaro,  

provincia de México.  


En mis giras del antiguo trabajo, 

en muchas comunidades rurales, 

del campo mexicano, 

no acostumbran a dejarse retratar, 

menos dar fotografías,

porque dicen, les roban el alma.  


Tu me robas un pedazo de la mía, 

guárdala en tu corazón.

Ya me conociste, en mi corteza,

también en mi xilema y floema.

Algo del interior incognosible, 

que aún yo desconozco, 

a través de lo que escribo.

Otro poquito de mi.

POETA DEL AMOR.06-01-13.

CABO SAN LUCAS, BCS. MÉXICO.

El alma espera la lectura,

mientras Él, no me llame a su tienda,

las letras de la pluma y corazón,

de tu primavera. 

  • Autor: arturo maldonador (Offline Offline)
  • Publicado: 7 de enero de 2013 a las 00:21
  • Comentario del autor sobre el poema: Fantasías entrelazadas con realidades, como la vida diaria. Ecos de los mundos interiores que cada quien llevamos dentro y que se asoman cotidianamente.
  • Categoría: Reflexión
  • Lecturas: 32
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