Como una grieta seca
el fondo del tiempo espera
estoy sobre el reloj del silencio
en su propio eje
en su propia manivela
en la propia vara suspensiva
evacuando su perdido acento.
En alguna parte esquiva mi presencia
en alguna parte quita los golpes del martilleo tenue de su biela
en alguna parte el museo del viento deja su torvo atajo.
El punto dócil desgarrando la calle amplia
donde a veces huye
todos los días lo veo con extraña ranura
una clave que me ha mirado desde los hombros de su voz
y de su nuca.
Son pasos esquivos que han dejado asombro
una escalera antigua que desciende en contrasentido
síntomas que nadie pudo borrar ni los viajes
ni el zapato viejo que hirió los perfiles incompletos
del distraído velero de su otro yo.
Y se desposa en la brasa dura de la piedra
no hay ecos en su atadura abierta
solo una grieta que sonríe a ratos por la emisión
aquella luz que la descubre
con la ubre esquinada
donde se ata y se adhiere al minuto perdido.
Veo su pesada sombra al yugo alto de su carcajada
la pálida ilusión contraída del suicida
y también veo el cordel prendido bordando gatos
soy testigo de su angosto arco
boca demedia luna que ríe sola.
Y desciendo a su propio lago
a su cuenca desde adentro
a sus sienes donde rebota inconmovible
inmutable
inseguro
la astilla que vive subjetiva
sobre el avaro reloj.
Le he dado cuerda, cordón a su propio aro
la aguja hincada en los gestos
entre los bordes secos que brota del asilo añejo.
El único animal que tiene dos sexos
en su vientre diminuto
ha sido ave sin plumas
en su prohíbo impacto de ser inmune.
En el muro cuando la fisura se vuelve mica dislocada
ayes desquiciados estampan su rostro en mi cara.
El gladiador lleva una zanja de aplausos
retumbando en la sorda piedra
trastornos que solamente juzgué por su mentira.
Nunca me dio la hora
solo una sombra de mercurio
una tinta de luz y de costra
casco de su pie volátil de girar y girar.
Bernardo Cortés Vicencio
Papantla, Ver, México
- Autor: bernardo cortes vicencio ( Offline)
- Publicado: 7 de enero de 2013 a las 13:14
- Comentario del autor sobre el poema: Le doy cuerda a la sotana del tiempo en su quebradiza queja que deja su aureola pegada a los pulsos de su tictac (a mi pulso), sobre el fondo se anidan mis dudas si esteré en el mismo lugar que él me señala
- Categoría: Amor
- Lecturas: 103
- Usuarios favoritos de este poema: Boamed Lòpez, Trovador de Sueños ...y realidades., Giovanna Castellanos
Comentarios3
Excelente y sentido en toda su extensión, amigo. Un gusto leer.
Saludos fraternos, que tengas un buen año 2013
Nos volvemos esclavos del tiempo, a veces es bueno olvidarnos de ese tic-tac en nuestra vida, bello poema, saluditos!
Muy bueno tu poema....gracias por compartirlo...besos
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