CANCIONES PARA ANA

Kabalcanty

 

CANCIONES PARA ANA

 

 

                                        -I-

 

 

Ahora

que la hoja ha encontrado

su lecho de muerte en la tierra

que la melancolía va a la grupa

de un viento del norte que huyó

que todo lo vivido

es limo dormitando en el charco

Ahora

es cuando debo nombrarte

Ana

tronco enraizado que amo

 

 

 

Una mañana gimoteando lluvia

juntos               desnudos

enlazados entre sábanas

tras noche de gozo

mirando los dos

tu pezón erecto

la sublimación del otoño

 

 -II-

 

Mañana

por el camino infantil del alba

soñado como espuma marina

aprenderé a decir te amo

sin recelo al filtro del agua

sin vergüenza al clamor del sol

Mañana

como me enseñaste       Luna

tomaré al tiempo por el pescuezo

y vaciaré mis bolsillos

de todas las obligaciones

que me han oscurecido

y me tumbaré desnudo

junto a su orilla cristalina

envuelto en el pulso

que sólo ella me compuso

 

-III-

 

Ungido de siempres

quiero amanecer

mis demás días

Abrazándome tus labios

con la rotundidad

de tus ojos

 

 -IV-

 

 

Si supieseis todos

de su llanto gozoso

                        de las espumas

                        que derramó

                        tras el orgasmo

                        de las bravas olas

                        de mi lerda caricia

mentiríais hasta el ser

por acurrucaros tan sólo

junto a un poro de su halo

Erraríais en pos

de esos fantasmas

del sempiterno allá

                        siempre allá

                        más allá de vuestras

                        manos

Porque si supierais todos

de la escarcha de su cuerpo

os veríais reflejados

en los remotos paraderos

que os pensasteis irreales

Acabaríais en la locura

de disolveros con ella

en un jirón de nube lluviosa

 

 

-V-

 

 

Del núcleo de mi poesía

volaste

y en el aire

te convenciste cuerpo

Soñada por las noches

te dejaste un retazo de embrujo

en los ojos murmurantes

como un estigma de tu venida

Desde tus manos

dejabas escapar el polvo astral

flirteando con la mejilla

que osaba respirarte

Sé que no te acordabas

de cuando eras sólo sueño

Lo noté en tu voz

de aliento estrellado

que vaporeaba monosílabos

sin importarle su paradero

Lo sé porque tu fijación

poseía un empeño onírico

que abandonaba tu cola

de huella ambarina

 

 

    Kabalcanty©1987

  • Autor: Kabalcanty (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 8 de enero de 2013 a las 19:20
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 69
  • Usuarios favoritos de este poema: Sara (Bar literario)
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos




Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.