Desgraciada el alma que te escribe
como sin ilusión los ojos que leen
esos ojos que tu corazón describen
esos que dentro de mi corazón ven.
Sin duda la muerte no os ha tocado
sin duda mi destino no era vivir en lejania
no lo mutilación de un amor separado
sino el olvido de la que nunca ha de ser mía.
Ahora que no queda más que esperar
ahora que libres esperamos cautivarnos en olvido
no queda descendiente alguno para luchar
no queda mas que esperanza, dolor y frio.
Desde tiempo inmemorial triunfa la vejez
compañera de la dama de negro
una nos guia por su camino, la otra nos toma a su vez
y nada ha cambiado pues nadie espera cambiarlo.
La luz siempre ha mostrado la finta,
un rostro puramente real como debemos tenerlo
nunca una persona ha sido totalmente conocida
ningún corazón totalmente descubierto
pues ninguno en el mundo esperaba conocerlo.
La cera sigue cayendo y el hielo se derrite
la tristeza marchita, con cada latido el corazón,
y la felicidad es un pensamiento que el pesimismo no permite
la vida es solo una esperanza en una apariencia sin sazón
por esto hay menos gente feliz que triste
nunca esperamos ser felices
pero siempre sabemos que en la vida siempre hay algo triste.
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Autor:
Joaquin Montreal (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 23 de enero de 2013 a las 02:39
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 43
Offline)
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