poema 45

lilith blad dracul

Déjame acariciar las flores que brotaron esta mañana de tu cabello y  los botones que aún no abren.

 

Déjame correr a tu lado sobre la hierba hasta caer arrodillada a tu cintura.

 

Quiero  ver tu rostro cual  ninfa entre los árboles, sentir el terciopelo de tu piel mojada.

 

Esos tus ojos  damisela mía, cual estrellas en el firmamento oscuro, de labios carmesí  como la débil llama bajo el espeso bosque.

 

Ángel dulce de  dimensiones celestiales, de encantos abruptos.

 

Sublime musa de los vientos, arráncame un suspiro  con el alma, que  mi necesidad  de ti se hace cada vez más grande.

 

Déjame tomar tu mano y entregarte el corazón, que he caído bajo el encanto  de tu sonrisa y el sórdido aroma de tu alma.

  • Autor: lilith (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 28 de enero de 2013 a las 22:02
  • Comentario del autor sobre el poema: Este poema es especial, surgió de pensar en una hermosa mujer y una persona especial. Espero les guste...
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 194
  • Usuarios favoritos de este poema: joaquin Méndez, arribaa1, Raúl Daniel
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios1

  • joaquin Méndez

    ¡Guau! Que sensual y apasionado tu dulce poema.
    Despiertas pasiones linda damisela.



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.