El sudor es antiguo.
Di vuelta mi espacio y
sin salir de este lugar
convivo con escarabajos.
No supo que decir el ciempiés y
se pierden los días dentro de los dias.
Nada más duro que la limosna.
Al final del día el cuenco estará vacío.
Ha de crecer nuevamente las ortigas
que escasean en tiempo de seca.
Se escuchan tus pasos remolcados
por sobre el pastizal seco
seco como el cuenco al final del día.
Mañana sangrará mis manos nuevamente
Se secó el roció y por la cañería
salen palabras de letanías.
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Autor:
Carlos Casagemas (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 3 de febrero de 2013 a las 06:43
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 37
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, joaquin Méndez, gallicida
Offline)
Comentarios4
Precioso poema, que tengas un lindo domingo!
Un sensacxinalmente bello y hermoso poema amigo Carlos
Saludos y amistad
Nada más duro que la limosna.
Al final del día el cuenco estará vacío.
Eso suele pasar amigo.
lindas letras.
un saludo.
Uno a uno tus versos caen cargados del gris de un momento especial en que todo es vacío y todo es soledad.
Grato de leer aunque marcado de tristeza y melancolía.
Saludos
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