Poco a poco, la mente te dibuja,
alma conoce, tu rostro distante,
invisible, como punta de aguja,
intuye tu sendero, el caminante.
Un infinito punto, el Alma Grande,
se desprenden mil rayos, de si mismo,
viaje, como a cada quien se lo mande,
en un vuelo, desde el cielo al abismo.
Ante mis ojos, extendido tu cielo,
dedos mayúsculos mueven celaje,
ave vertiginosa, arrastra el velo,
en mi avidez, muestra su piel de encaje.
Aunque no distingo, fluye corriente,
tenues oscilan, pinceladas blancas,
en tu espacio, ante mi vista consciente,
polvos de mis montañas, los arrancas.
De vigía, mirando lo sin forma,
escondido azul, en noche celeste,
en silueta de mujer, se transforma,
cuerpo de plata, anda del este al oeste.
EL POETA DEL AMOR. O7-02-13.
CABO SAN LUCAS, BCS. MÉXICO.
- Autor: arturo maldonador ( Offline)
- Publicado: 8 de febrero de 2013 a las 00:34
- Comentario del autor sobre el poema: El cielo y la luna, todos los días, ante nuestros ojos. Por qué están allí, y estamos nosotros? En el Universo está la respuesta. Mientras, gocemos estas bellezas con el ojo profundo del alma.
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 69
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios2
Un sensacional poema lleno de espiritualidad amigo Arturo
saludos
La luna es una musa para todo poeta , bien logrados tus versos amigo
Saluos
Rafael
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