Entra, no me tengas miedo.
Aquí donde estoy
no podré hacerte daño.
Siéntate...¿decidiste venir a visitarme?...
Me alegro. Hace días que tengo la ilusión
de que lo harías.
Todo en la vida llega.
Y para mí, ha llegado este momento.
De estar donde estoy,
y tenerte a tí, delante de mí.
¿qué vienes a decirme?...
Acepto que no hayas venido antes.
No fui digno de tu visita.
Pero ahora lo estás haciendo...
¿Digno soy ahora de tu presencia?...
Después de tantos años...
¡Qué orgullosos hemos sido!
Ha llegado el momento de aplacarlo.
De deshecharlo.
Ha llegado el momento...
del cual muchos han de sentirse felices...
cuando llegue, mi final...
Gracias por pedirme perdón...
Aunque tendría que ser yo
el que te lo pida.
Perdóname tú a mí.
Los años pasan...
Vuelan... sin darnos cuenta.
Si nos diésemos cuenta
de nuestros errores
cuando tenemos salud,
y estamos de pie, todo hubiese
sido tan distinto...
Recién ahora, aquí donde estoy,
me doy cuenta qué cruel he sido
cuando en pie me hallaba.
Ahora estoy en cama,
enfermo, y muy cercano a mi final...
cruel... por haberme comportado
como lo hice.
Quise llevarme
el mundo por delante,
prosperar, triunfar, amar...
y ser amado... parte de ello lo logré,
y no he sabido retenerlo...
Prosperé, triunfé, amé, me amaron...
me amaste, y ya todo lo he perdido.
Recién ahora me doy cuenta
que hay que seguir la ley de Dios,
pero cuando nos sentimos bien,
la ignoramos, la dejamos pasar...
Y cuando la vida todo nos quita,
más cerca del Señor nos sentimos...
¡Cuántas veces te he llamado,
y todas ellas me has evitado...
como a un leproso!...
No te recrimino, solo
estoy recordándotelo...
Tus silencios eran justificables,
no quería aceptarlos
ni entenderlos...
Pero la vida me ha enseñado
que en este mundo,
no hay que ser tan porquería...
Sí, déjame decirlo...
Lo he sido, pero me estoy dando cuenta
demasiado tarde.
Decidiste venir a visitarme...
por lástima, ¿verdad?
porque sabes que dentro
de muy poco ya
no estaré en este mundo.
¿Sabes? Ya no le temo a la muerte...
ella me espera...
Yo a tí te he esperado tanto...
y tú me has pagado con lo
que me merecía, con tu silencio...
Las horas que he desperdiciado
donde no debía estar...
Ahora mis amistades no vienen
ni han venido a visitarme.
Solo estás tú... mi ex esposa...
la que fue mi amor,
y la que perdí, por cruel...
Por ambicioso, por dedicarme
a la vida nocturna,
con mujeres y amigos
que no se lo merecían.
Tenía dinero, tenía poder...
Ahora ya no los tengo...
Te tengo a tí, a mi lado...
cuando debí haberte tenido siempre...
Sí, siempre, y también a tí
te perdí, por mi culpa...
Déjame llorar, déjame...
no me consueles, no me lo merezco...
La que está por llegar me merezco...
no me consueles, pero quédate
a mi lado, hasta el final, te lo pido...
Mi final está cerca... mi amor...
déjame decirte así, siempre
lo has sido... siempre...
Solo te pido me des,
un último favor...
que me beses... deseo...
tu último beso...
y he de morir feliz... gracias, amor...
Todos los derechos reservados del autor( Hugo Emilio Ocanto - 21/02/2013)
- Autor: hugo emilio ocanto (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 21 de febrero de 2013 a las 01:24
- Comentario del autor sobre el poema: Lo lamento. Lo grabé cuatro veces, y no pudo ser. L@s amo
- Categoría: Amor
- Lecturas: 32
- Usuarios favoritos de este poema: Hugo Emilio Ocanto, VENDAVAL DE ILUSIÓN, El Hombre de la Rosa, claudia07, lindaestrella, Maria Hodunok., gisell_v, Hija del Sol
Comentarios8
Huguito!! tremendo poema, tremenda realidad, y vos todo lo podés, hasta hacer poesía de estas situaciones límites.
Dejame decirte una vez más que la piel de pollo se acentúa en cada frase, en cada verso, en cada guión.
Espectacular ami de mi corazón
Besotes inmensos y toda mi admiración
Gracias amiga, lamentablemente no he podido grabarlo. Imposible. Un abrazo: Huguito
Mi amigo...me quedo sin palabras ante su conmocionantes y nostálgicos versos. reciba ud un abrazo de este su amigo que lo aprecia con el alma.
Gracias querido amigo. Lamento no haberlo podido grabar. Intenté cuatro veces, y no fue posible. Me apena, pero... adelante. Será en el próximo. Gracias, poeta. Un abrazo: Hugo
Aún así irradia belleza sus letras mi amigo.
Gracias amigo. Pero me apena no haber podido hacerlo.
Un escelente y bello monologo amigo Hugo
Saludos y amistad
Muchas gracias Poeta. Saludos y amistad.
hermoso y triste amigo pero una realidad cruel , en tus letras ,abrazos
Gracias Claudia por tu comentario Abrazos: Hugo
¿Sabes? Hasta la piel se me erizó al leer, que triste llegar solo al final de los días, ésta situación, creo, que es muy común desgraciadamente, pues los humanos así somos, nos dejamos llevar por los placeres del mundo y olvidamos lo esencial, la familia y al ser amado que tenemos a nuestro lado, precioso tu escrito y déjame decirte que aunque no pudiste colgar el audio, al leerlo en mi mente se escuchaba tu voz, un abrazo!
Muy complacido y agradecido por tu comentario lindaestrella. Gracias , por tu imaginación, escuchar mi voz. Un abrazo: Hugo
MUY BUENO HUGO, y muy triste tambien, ahi
falto tu voz, para poder apreciarlo mas, pero
este monologo lastima en el alma, cuando nos
damos cuenta que llega el final, me gusto
mucho leerlo, amigo del alma.
CARIÑITOS DE LUZ.
Gracias María. No tienes idea lo mal que me puse por no poder grabar. Una pena. Espero con el próximo tener suerte. Cariños, querida amiga:Hugo
Mi corazón se puso chiquito, amigo lindo.
¡¡¡GRANDIOSO!!!
Mi te quiero, abrazos y besos, en cascada
Gracias Gisell besos
Triste, pero tan cercano a una verdad, a una realidad de vida y mira qué bien sentí cuando llegué a enterarme de quién era la persona que lo acompañó, a veces en esos momentos es cuando llega la compañía quien tiene que llegar... a quien tanto se le hizo daño en vida.
Hermoso monólogo Hugo, te aplaudo de pie y con sonrisas brotadas de mi alma enjugadas en lágrimas por tan bella entrega.
Un abrazo inmenso...
En mi sentir, a pesar de las distancias físicas y del corazón que tuvieron estos personajes, su reencuentro fue en realidad por amor. Ël la esperaba. Ella fue a visitarlo demostrándole que también lo quería, y el beso de ella... fue el final de vida de su ex esposo. Murió, siendo feliz por la presencia de su gran amor, el cual en vida no supo mantener. Gracias, lis. Gracias por tu aplauso, por estar, por tus sonrisas y tus lágrimas. Inmenso abrazo, amiga: Hugo. PD: lástima no he podido grabarlo, imposible.
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