HISTORIA DEL CIELO
Cuentan los días, las horas...Y el minuto les parece inmenso.
La luna ya ha aparecido y se han jurado amor eterno.
Las luces de las casas, a lo lejos, brillan como estrellas fugaces, y una de ellas, la más chiquita, envuelve la cara de la niña.
El la mira embobado y piensa:
"No puede ser, es un sueño".
Y recuerda los días pasados...
María, la hija del terrateniente, y Diego, fruto del amor del obrero.
Imposible unión y desespero.
Citas clandestinas...Piensas en verso.
El niño se pasaba los días mirando al balcón del cielo, y es que el padre de la niña tiene enjaulado sus rizos de oro. Y ella, entre visillos, le ha tirado una rosa...Y un beso.
Sin embargo, va a terminar este sufrimiento.
El ama de llaves, ya anciana y que quiere a María con toda el alma, ha metido una llave entre sus encajes de plata, y le ha dicho al oído, con voz firme y bien clara:
-"Huye cariño mío. Cuando la noche se cierre y los sueños estén dormidos, deslízate pr la puerta y vete lejos, muy lejos"
-"Mi ama, mi dulce y querida ama. ¿Y qué pasará contigo, cuando se entere mi padre, que me has abierto las puertas del cielo, de su infierno preparado?
-"No te preocupes, mi reina. Mi vida no vale ya. Soy anciana, con muchos años vividos, y si tengo que morir, prefiero que sea así, con mi niña en libertad.
...Ya se ha cerrado la noche. la casa durmiendo está. Y María, con su macuto en el hombro, se dirije hacia el portal.
Le ha dicho a Diego, su amor, que la espere en la ribera, donde la luna refleja, en sus aguas, su color.
Pasa delante del cuarto de su padre...Parece que está dormido, aunque se oyen sonidos de su permanente nerviosismo.
Pero la niña no hace ni un solo ruido....
Ya queda solamente la puerta de entrada y afuera, la libertad.
Abre el cerrojo con fuerza, sin ruido, sin miedo.
Ya sola en la calle, con su vestido de raso y sus pendientes de perla, parece la niña una reina.
La luna y el cielo se han alíado con ella. No hay nubes, pero sí muchas estrellas. Y la luna, de reojo, le ha dicho a las luces bellas:
-"Guiad hasta la ribera a mi sueño; Que se una con el mar, que palpiten sus sentidos de aquí a la eternidad"
Ya están juntos los amores, y, acurrucados los dos, se han quedado dormidos.
Mañana será otro día.
Hoy el mundo entero, suyo es.
Lydia Casillas
- Autor: Lydia Casillas (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 6 de marzo de 2013 a las 05:53
- Categoría: Amor
- Lecturas: 119
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, lunademiel80, Blancalis, gerd
Comentarios4
Me agrada sobremanera tu esplendida forma de plasmar tus bellas letras de amor en tu portal poetico
Saludos de afecto y amistad
Críspulo
Me alegra enormemente tus palabras y me halagan
Muchas gracias, amigo mio
Saludos desde Salamanca
mujer me acordaste de la infancia cuando para adormir me leían un cuento buena trama y desenlace
Gracias lunademiel
¡qué hermosura!
ES un lujo pasar por tu espacio y tu bella poética, salmantina!!
Abrazos enormísimos desde esta Buenos Aires, que cobijó a una paisana tuya que nunca pudo volver!
Besos
Mil gracias por tus palabras, preciosa.
Nunca es tarde para volver
Abrazos enormesssssss
La audacia de tu pensamiento describe una insolita: "HISTORIA DEL CIELO" . Felicidades Lydia, a tu Ama de llave y a María.
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.