... Y en la noche, en soledad, llorar en silencio por no poder volver a dar por estas manos lo que antes nacía de entregar a ese ser amado que desvela mis sueños ...
syglesias
Presenta
NO pidas lo que NO me nace DARTE:
No pidas lo que no me nace darte, al no ser un beso en la frente, para que con llanto en los ojos, sientas con tristeza nacida del alma, cuanto es lo que duele el desprecio del ser amado que antes sabia esperar con los brazos abiertos tu llegada, para besándote los labios hacerte el amor como solo lo sabe hacer un hombre sincera y sentidamente a su mujer...
No pidas lo que no me nace darte, siquiera arrodillándote a los pies porque tu tiempo de amar ha expirado dolorosamente dentro de mi corazón inconmovible, donde mismo sucumbió la palabra amor pronunciada tres veces por mi boca al viento sin ser nunca escuchada quedando en el olvido, sí, en el olvido por todo lo vivido por caricias con la piel desnuda...
No pidas lo que no me nace darte, extendiéndome suspicazmente tus manos, para que si decidiera besarlas como antes pueda recordar esa sutil fragancia que tanto gustaba pusieras en tus suaves muñecas, en tu sensual cuello, tomándote luego por tu fina cintura, diciéndote en voz baja al oído cuanto te amaba, vida mía, haciéndome con tu presencia, más feliz.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 13032013 06:25 PM.
syglesias
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NO pidas lo que NO me nace DARTE:
No pidas lo que no me nace darte, al no ser un beso en la frente, para que con llanto en los ojos, sientas con tristeza nacida del alma, cuanto es lo que duele el desprecio del ser amado que antes sabia esperar con los brazos abiertos tu llegada, para besándote los labios hacerte el amor como solo lo sabe hacer un hombre sincera y sentidamente a su mujer...
No pidas lo que no me nace darte, siquiera arrodillándote a los pies porque tu tiempo de amar ha expirado dolorosamente dentro de mi corazón inconmovible, donde mismo sucumbió la palabra amor pronunciada tres veces por mi boca al viento sin ser nunca escuchada quedando en el olvido, sí, en el olvido por todo lo vivido por caricias con la piel desnuda...
No pidas lo que no me nace darte, extendiéndome suspicazmente tus manos, para que si decidiera besarlas como antes pueda recordar esa sutil fragancia que tanto gustaba pusieras en tus suaves muñecas, en tu sensual cuello, tomándote luego por tu fina cintura, diciéndote en voz baja al oído cuanto te amaba, vida mía, haciéndome con tu presencia, más feliz.
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Sergio Yglesias García
Caracas, 13032013 06:25 PM.
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Comentarios2
Una gran verdad es que el amor no recibido, tarde ó temprano se cansa de ser pregonado y desaparece. El amor de un hombre es igual de intenso al que siente una mujer. Un gran poema. Felicidades, syglesias.
Lo que no te nace dar: poeta, aplaudo tu tema, a pesar de ser muy pero muy triste, es un excelente poético poema. Mi felicitación por él. Un saludo y un abrazo: Hugo
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