Quemando nuestras cartas de amor (Grabado)

Hugo Emilio Ocanto

Muchos años han pasado amor,

desde el día que nos conocimos.

Hoy mi alma solo de mis recuerdos vive.

Recuerdos del pasado, de juventud.

Ya nuestros hijos grandes son,

y nuestros nietos por toda la casa

corren. Alegran mi vida.

Soy feliz, a mi manera.

Pero... no te tengo a tí.

Has partido de este mundo,

y sin tu amor estoy.

Te cuento que estoy muy

enfermo. Un mal acecha mi vida.

Hoy solo estoy esperando mi muerte-

Aparte de mi incurable mal,

cerebralmente dicen

que mal estoy.

Los escucho a ellos, nuestros hijos.

comentar entre ellos,

hablando bajito,

muy confidencialmente.

Pero los otros días,

mi indiscreción percibió

una comunicación telefónica

que tuvo uno de nuestros hijos,

con una de sus cuñadas.

Me entero de que mi mal

muy avanzado está.

No le temo a la muerte.

Le temo a la vida.

Sí, muy mal he de estar.

Me hacen entender con diplomacia,

que divago permanentemente.

A veces estoy consciente de ello.

Otras veces, no reconozco

quién soy. Vivo con mis pasados

recuerdos, los cuales tú llenabas mi vida

con tu presencia. Ahora ya no estás.

Agrega a tu ausencia,

esta mi enfermedad,

la cual irreversible sé que es.

Y este cerebro que a veces

no responde normalmente.

Tengo tantos seres queridos a mi alrededor,

nuestros hijos y nuestros nietos,

pero me faltas tú.

Estos días he estado leyendo nuestras

mutuas cartas de amor,

las cuales están amarillentas por el

gran tiempo transcurrido,

y hoy precisamente,

tengo juntas todas ellas

en mi poder.

Tengo los días contados,

y días colmados de locura,

angustia y soledad.

Me faltas tú, y deseo ir

a tu encuentro, clamo porque

ello ocurra. Mi necesidad de ti...

pero tú no estás presente.

Ya nada pretendo de la vida.

Vivo en una total soledad.

Me faltas tú... y deseo ir

 a tu encuentro, clamo porque

ello ocurra. Mi necesidad de tí...

pero tú no estás presente.

Tu ausencia me mata, me enferma,

mi alma siento que se debilita,

y mi cerebro que se marchita.

Que no actúo ni razono normalmente.

hoy, con nuestras cartas en mi poder...

y con el deseo de que ellas

se vayan conmigo.

No sé si después que me ausente

de esta vida, vaya, no sé, tal vez, al cielo

o tal vez al infierno. Delante mío encendida está la chimenea,  dándole a mi cuerpo

un poco de calor. Últimamente siento mucho frío.

Y hoy determino quemar estas,

nuestras cartas de amor.

Las arrojo sobre el fuego.

Veo se queman, se extinguen,

van apagándose todas

nuestras hermosas palabras de amor.

El fuego las consume.

Miro quemándose están,

se extinguen... como se está extinguiendo mi vida.

Adiós cartas, adiós mi amor,

adiós mi vida...

mi muerte se aproxima,

quisiera entrar a esa chimenea,

y quemar mi vida

junto a nuestras cartas de amor.

Ahora, solo espero mi final.

Mi vida sin tu presencia,

sentido no tiene.

Todos los derechos reservados del autor( Hugo Emilio Ocanto - 19/03 2013) 

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Comentarios +

Comentarios11

  • claudia07

    hermos y triste poema amigo mio , me extremecio el alma , abrazos

    • Hugo Emilio Ocanto

      Mi agradecimiento Claudia por comentario.Abrazos: Hugo

    • soki

      Triste pero hermoso y muy verdadero. Cuantas veces uno conoce parejas que al perder a su ser amado no resisten la soledad y al poco tiempo se marchan de este mundo. Un gran placer leerte amigo mio.

      Besos y abrazos, soki

      • Hugo Emilio Ocanto

        La ausencia del ser amado, que ya no existe, deja huellas en el que queda. Unos se resignan para toda la vida . Y al saberse próximos a la muerte, claman por ella. Gracias, poetisa. Beso y abrazo: Hugo

      • ClaudiaAlheli

        Cuanta tristeza emana este bellísimo escrito, la vida de alguien que prefiere la muerte inminente a la ausencia de su ser querido, aún estando rodeado e otros afectos.
        Algo muy cierto y común en este mundo amigo Hugo.
        Saludos y un gran abrazo fraterno.
        Claudia Alhelí Castillo

        • Hugo Emilio Ocanto

          Es la necesidad que sintió el poeta de transmitir.Suceso imaginario. Muchas gracias Claudia. Saludos y un fuerte abrazo: Hugo

        • Alejandro O. de Leon Soto

          Tu capacidad de monologuista lo dejas de manifiesto en cada cosa que escribes amigo., este, con tintes de dramatismo y apasionamiento nos lleva de la mano y nos muestra un gran poema de un gran escritor......un abrazo BRO

          • Hugo Emilio Ocanto

            Tu comentario me da mucha alegría, querido hermano amigo. Muchas gracias Alejandro. Mi saludo y un abrazo BRO: Hugo

          • El Hombre de la Rosa

            La delicadeza de tus versos son el alimento de los poetas que sienten el armonioso ritmo de tu preciado poema de amor estimado poeta y amigo Hugo
            Saludos españoles de amistad y afecto
            Críspulo

            • Hugo Emilio Ocanto

              La sinceridad y aliciente de tu comentario, me hace feliz, poeta MAXIMO. Gracias. Saludos Argentinos de amistad y afecto: Hugo

            • arnaiz

              Cuando se va acercando la hora de nuestra muerte pensamos en los milagros y nos agarramos a la vida.
              Pero la realidad es otra, vemos que esto se acaba y corremos a ponernos en paz con todo el mundo, como no podria ser de otra forma.Ligeros de equipaje al hacer el ultimo viaje un abrazo.

              • Hugo Emilio Ocanto

                Hermoso y auténtico pensamiento, poeta. Muchas gracias. Un abrazo: Hugo

              • Maria Hodunok.

                PRECIOSO AMIGO, pero ese dolor que expresas nos hacen lagrimear, amiguito, se que es imaginario, pero bello, muy bello.
                CARIÑITOS DEL ALMA.

                • Hugo Emilio Ocanto

                  María: en este preciso momento, comprendo. Mi imaginación, a veces, no tiene límite de expresión. Gracias por encontrar belleza en él, a pesar de lo triste. Cariños del alma: Hugo

                • victolman

                  UN SENTIDO MONÓLOGO MI ESTIMADO AMIGO... PERO, NO DEJA DE SER PROFUNDO Y BELLO EN SU CONTEXTO...
                  TIENES UN SENTIMIENTO EN TU VOZ QUE ATRAPA LA CONCIENCIA Y LLEGA AL ALMA...

                  SALUDOS MI ESTIMADO POETA Y AMIGO...
                  DIOS TE BENDIGA RICAMENTE...
                  ABRAZOS.

                  • Hugo Emilio Ocanto

                    Debo decirte que tu comentario, me ha dado paz al alma, me parece maravilloso para ella. Muchas gracias Vic. Mi saludo, un abrazo y que el Señor te bendiga: Hugo

                  • Poemas de Pepita Fernández

                    BUENÍSIMO!!!ES CIERTO CUÁNTO CUESTA VIVIR SOPORTANDO LA AUSENCIA DEL SER AMADO, CRUEL Y DURO PERO ES LA REALIDAD DE MUCHOS
                    UN BESO POETA PRESENTE!!!!

                    • Hugo Emilio Ocanto

                      Me resta agradecerte tu plácido comentario Pepita, amiga. Un beso, poeta amiga presente: Hugo

                    • lindaestrella

                      Precioso como siempre Hugo! Nos haces llegar hasta lo profundo del sentimiento en tus poemas, un abrazo!!!

                    • Murialdo Chicaiza

                      Cuando leì tu poema recordè un libro que espero que leas. Se trata de "Antes del Fin" de Sabato. Lo leì hace poco. En realidad me deprimiò pero espero que a ti no te suceda. Amigo, es importante que aprendamos a morir y a envejecer. Parte de vivir con dignidad es recibir esa hora, esos dias, esos años, tal vez.
                      Lo que quiero decir es que todos cumplimos con un ciclo. Lo importante es lograr dejar este mundo con la esperanza en la eternidad y con el deber cumplido. Es de valientes enfrentar a nuestro destino y creo que tu lograràs cumplir tu cometido y tu destino. Recuerda que siempre tendràs a este amigo...

                      • Hugo Emilio Ocanto

                        Poeta, se tendrás en cuenta que muchas veces los temas son ficción, imaginarios. Pero en nuestro interior, como poeta, algo debe existir DE VERDAD, aunque sean imaginarios. Estoy cumpliendo mi ciclo de vida, esperando en mi realidad su final, pero con la inmensa satisfacción y alegría de estar en esta página, que como sabrás, es parte de mi existencia. He de recordar siempre el ofrecimiento de tu amistad, amigo. Gracias.



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