Ocurre en su venida.
Un calendario marcado por los días.
Que a cucharadas poco a poco ofreces.
Largamente ella quisiera,
Lamentable me asalta el tiempo.
Cuando su rostro sale del escondite del cabello.
Cuando se estiran los frutos de sus labios,
Espaciados y lentos como los cielos que yacen en las ciudades.
Largamente ella sale a la hora de la flor,
a la hora que ofrece el funeral de la noche.
Largamente ella quisiera.
Metidos en capullos, tirados en las hojas secas.
Alargados entre las bignonias, complacidos por lo que el reloj nos da.
Humberto Velásquez
26-03-2013
10:32 p.m.
- Autor: Humberto Velaji (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 26 de marzo de 2013 a las 13:36
- Categoría: Amor
- Lecturas: 44
- Usuarios favoritos de este poema: nellycastell, ADOLFO CESAR MARCELLO, Ella es azul, eclipsada
Comentarios2
Precioso...acaso las ciudades conocen de su esencia para anunciar su llegada con la aurora de tus letras...Un abrazo poeta y siempre gracias.
Algo tan simple ...por señalar: "a cucharadas esa medicina de amor que nos alimenta para vivir."
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.