Tu piel, dulce lucecita,
es el espejo en donde los duraznos
caen a maquillarse de dulce dulce la piel
y es hermosa la fe con que asistes a mi nacimiento
entonces yo te hablo en despacito
y que toda tu armonía
siga cantando la esperanza de un río
yo
que mí yo no llega a pececito
y te vas hasta el sol
con tus nonis nonis
a conservar mis sueños de alma
y tu niñito
duerme que te duerme
en lo sagrado de tu omni-impotencia
hay un niñito abierto
de par en par
que te aflora el suelo para que pises
o para que andes loca en bicicleta
y duerme que te duerme
mi chiquitita
cuando te sacas tu vestido de canción
y encendes tu piel
enteramente
se apaga el dolor del mundo
y tu niñito
duerme que te duerme.
- Autor: Microscopio carnivoro ( Offline)
- Publicado: 30 de marzo de 2013 a las 00:20
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 89
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa, Sara (Bar literario)
Comentarios3
Creí que nunca más lo volvería a leer, y que jamás tendría que reconocerme... dentre toda la ruina de mi nombre. Afortunadamente, precisamente, me equivoqué de nuevo.
y ni le entendí nada a su poema
Usted no entiende nada porque es malosa 🙁
Una genial bella y preciada manera de plasmar las bellas letras de tus hermosos versos amigo Microscopio Carnivoro
Abrazos españoles de amistad y afecto
Críspulo
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