¡Debí percibir el frío de tus ojos
en tu mirar calculador;
pero le puso a mi razón cerrojos,
y me volví un ignorador!
¡La sonrriza forzada de tu boca,
no supe en su momento descifrar:
Que tu mirar en sí,provoca..
pero tu corazón no quiere amar!
¡Sabio el jardinero que planta varias rosas,
y las vá limpiando con su mano,
para así atraer las mariposas,
y pasear por su jardín,cuando sea anciano!
¡Falto de saber fuí en mi juventud para contigo,
debí discernir tu indiferencia,
tú no me quisiste ni de amigo,
yo en mi dignidad, te dí mi ausencia!
Autor:Bernardo Arzate
- Autor: Bernardo Arzate Benítez ( Offline)
- Publicado: 5 de abril de 2013 a las 01:44
- Comentario del autor sobre el poema: Recordando cosas de mi juventud...
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 27
- Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Comentarios3
Una preciada obra poetica que llena de armonia el alma del lector señor y amigo Bernardo Arzate
Abrazos de amistad y de afecto
Críspulo
Bello poema y hermoso ese verso (del sabio jardinero que planta varias rosas...) Un fuerte abrazo, Lidia.
Gracias,Lidia.Es un placer tenerte por acá.Un fuerte abrazo.
La ausencia es un arma de doble filo, si es por revancha es mejor seguir el camino sin rencores no pienses que pudiste hacerlo mejor. Me gusto tu poema un abrazo.
Gracias,Eva.Como nuy bien lo dices,es mejor seguir cada cual por su camino.además¿Para que querermos una persona que no nos ama?Saludos.
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