TE EXTRAÑO...

Te extraño... con la pasión que desborda de mis ojos,
Y una lágrima que roza por mi mejilla, con el sublime candor del recuerdo,
Te extraño... con la mirada perdida hacia el azul del cielo,
Y en mis versos, la mágica presencia, de tus besos como mi precepto…

Te extraño... y aun puedo sentir el calor de tus abrazos,
Y la cálida sonrisa que me ofreces de tus labios, son el delirio que me enloquece,
Te extraño… mas no puedo dejar de expresar el amor que en mi corazón tallaste,
Y el sin fin de argumentos necesarios, para poder decir lo que mi amor de ti apetece…

Más solo tus abrazos, son el descanso que mi larga letanía condiciona,
Para poder dejar de llorar y nuevamente comenzar a soñar,
Más solo de tus labios puedo esperar, como el día se asoma por las mañanas,
Al caer el velo del esplendoroso anochecer y juntos poder nuevamente renacer...

¡Mírame! ¡Escúchame! Siente como mis palabras desangran,
Siente como mi alma por tu carente cariño se desgasta,
¡Ámame! ¡Hazlo ya, que me desespero! Ámame sin condición y sin remedio
Y calla de una vez mis coplas con el sabor tan elocuente de tus besos…

Que el aroma de nuestra pasión, sea solamente en esta historia una sola,
Que la suave brisa del viento, me permita sentir el sabor de sus anhelos,
Que la mágica palabra sepa renunciar ante el latente tiempo que nos separa sin dudar,
Y que las ansias que me devoran me permitan acercarme más, y pueda verte aunque sea unos segundos y así poder llegar a descansar…

Te extraño… no tienes idea de cuánto,
No intentes interpretar el dolor de mi llanto,
Que si lo haces, arderás en deseo de pasión
Como lo hago, como lo hago con el corazón en mis manos…