*
Clarines infernales, flores negras,
las imágenes, metáforas viven,
susurran con ese aliento nocturno,
hasta lograr la maldición enferma,
le tengo miedo, yo escucho a la Vieja,
lejanas tristezas de árboles muertos,
y lloran las almas, la Bestia existe,
tiene cara de serpiente sedienta,
y aparece con sus ojos enfermos,
para devorarnos muy lentamente.
La Bestia es oscura como el silencio,
no tiene manos bellas, sino garras,
vive en las sombras, en delirio eterno.
**
Su enfermedad está dentro de mi alma,
dice cosas al oído, me invita,
ofrece esa copa, placer sin frenos,
odia siempre, ellos son el enemigo,
saborea el corazón de lo ajeno.
Las voces olorosas como el oro,
descubrimos la luz de esa locura,
la vida es cruel, triste, suave veneno,
aquí mueren sentimientos, ternuras,
todo gira alrededor de mi piel,
como los aromas de primavera .
Nada importa el dolor, las sepulturas,
la frescura de esa voz que atormenta,
las frutas prohibidas, las deseadas ,
que se pudran las palabras sagradas,
los rostros fúnebres de los que sobran.
Mi Amo me protege con su mirada,
sus ojos son los míos para siempre.
***
Si supieran la verdad, morirían,
la peste nos cubre, flor en el aire,
te saluda, grita, ¿puedes sentirla?,
yo siempre la siento, Dios, no se rían,
una silueta azul, piel amarilla,
como los ojos de un ángel, me mira,
tú sientes que te miran cuando duermes,
habla con tu imagen en el espejo,
busca en tus ojos, muy dentro de ti,
puedes ver ese rostro que te llama,
dice mis secretos, no puede verme.
****
Yo la veo cada noche, a la Vieja
sus ojos rojos están en el techo,
en el espejo del baño, la mente,
en mi computadora, en cada sueños,
en el suspiro oculto, en la ventana.
La Bestia me acecha, ya no se aleja,
está en el techo, quiere entrar a mi alma,
resisto, rezo lo que sea, temo,
le tengo miedo a las fosas oscuras,
la Sombra lo sabe, me está mirando,
calma mis temores, debilidades,
mis gustos locos, mis enfermedades.
Ella apaga las velas del rincón,
apenas duermo, sufro, estoy temblando.
*****
Dios, cuánto terror, la muerte se acerca,
a veces la respiración me falla,
el ladrar de aquel perro me despierta,
escucho las carcajadas, insectos,
ellos duermen dentro de mis zapatos,
sé que pronto subirán a la cama,
entrarán muy lentamente a mi sangre,
mi intimidad, cerca de mi almohada,
hablaré solo, con mi sombra gris,
hasta que llegue la dulce mañana.
***
***
Cuando son las tres de la madrugada
las aves nocturnas hacen silencio,
las almas miran el infierno gris,
el canto del reloj se desvanece,
El perfume de la Bestia se acerca,
Ella está gritando, la puedo ver,
su imagen se transformará en mi cuerpo,
Ella reza cerca de la pared,
me mira, quiero gritar y no puedo,
ya no hay nadie en esta casa, estoy solo,
siento que la existencia me abandona,
Ella está aquí, toca mi cara, muero.
***
****
Ya no pude dormir, estoy muriendo,
Dios mío, créanme, yo no estoy loco,
la Bestia infernal, es la misma Vieja,
se burla a carcajadas, se transforma,
son insectos, cubro mi rostro, tiemblo,
los ojos que me asustan, el infierno.
- Autor: Gerardo Barbera (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 24 de mayo de 2013 a las 11:30
- Categoría: Sin clasificar
- Lecturas: 74
- Usuarios favoritos de este poema: Mar (Bar Literario), claudia07
Comentarios4
Parece un cuento de terror o.O
la bestia, la vieja... son la muerte ?
ejercicio poetico de imaginación
me gustaría mas uno de amor que te quedan
bordados
mñana es una promesa de amor
gracias mi niño
MUCHA IMAGINACION AMIGO MUY BIEN , ME ENCANTO TE VA LLEVANDO CADA LETRA TE ATRAPA ,ABRAZOS
gracias, claudia
Gerardo que gustó leerte pero lo hago despacito, tienes demasiada imaginación Tanto que me da miedo, pero se me quita al leer la excelencia de tus versos.
Felicitaciones,
Un abrazo
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