AMOR MÍO, DÓNDE ESTÁS

Gerardo Barbera

 

*

 

En el espejo las voces lejanas,

ese olor a hierba fresca, todo es frío,

el naufragio de selva cristalina,

gemidos solitarios, alas ciegas,

aves melancólicas, sin ventanas,

las suaves aguas del infierno eterno

amargan la paz de la primavera,

 florecen en mi mente los recuerdos,

como el llanto de las noches oscuras,

como estrella triste que se va lejos,

con el lucero gris de la mañana,

la neblina, el silencio, la quietud,

aquel volante terso, el ruido seco ,

el silencio cómplice de los árboles,

el horizonte floral del camino,

del cielo apagado, eterno y blanco,

la soledad azul de los gusanos,

la primera noche de ojos ciegos,

las sombras desvanecida, el sol,

la esperanza perdida en el pantano

entre la furia de los dioses muertos.

 

 

**

 

 

La gente grita, siluetas de moscas,

cantan, bailan, le lloran a la noche.

Yo suspiro ese silencio tan especial,

la última vez que la flor de tus labios

pronunciaron mi nombre con amor,

yo te sueño amor mío, te extraño.

¡Oh Dios, cómo duele la soledad!

Cómo duele no verte, te recuerdo,

cantos de viejas aves en mi mente

el sonidos de las viejas campanas,

yo te amaré, nací para quererte,

será castigo infernal para siempre,

soy otro culto más entre las sombras,

milagro, agonía, dolor y muerte.

 

***

 

Mustias agonías, humo y tinieblas,

ahora sus voces vienen de muy lejos:

“padre nuestro, Ánima del Camino,

 espíritu celestial, te rogamos.

Fúnebres  murmullos en el aire,

sonidos incoloros que se ocultan,

en cada destello gris de esas velas,

se iluminan mentiras que aparecen,

de ojos hundidos sin esperanzas,

los que se entrometen en mis neblinas.

A mi lado,  las hadas de la oscuridad

las que abren  las tumbas moribundas,

se alimentan de las luces aciagas,

fulgor  de la Nada que se oculta

más allá de la suerte descarnada

de los que lloran tristes en sus tumbas.


 

****

 

Efímeras imágenesde de luz

las nubes frías de la tarde gris,

todo navega en la mente perdida

no tengo cuerpo, ni alas, ni canciones,

todo fue ilusión,materia podrida,

no hay sombras blancas, espirituales,

ni dioses alados de ojos azules,

solamente restos de sangre yerta,

que invade cada centímetro negro

  de humedad, de este barro sin vida,

El miedo vuelve terrible, mortal,

sobre la imagen de la carretera,

de esa última mirada de un muerto,

como el asfalto frío, doloroso,

 lo último que vi, piedras y más piedras,

al final, este lodo, estos huesos,

la morada final de aquellos sueños,

aquí el tiempo quieto es para siempre,

todo esta lava pesada que me hunde,

lentamente en demencia circular

donde yacen caminos sin regreso.

 

*****

 

Era una fría tarde, viernes, sombras,

lo sé por la brisa negra y cruel,

la humedad de las caricias, el sueño,

 cansado, el sol caído, sin luz,

 melodías, las flores celestiales,

mi esperanza flotando libremente

Una luz en mi cara, muere el tiempo,

el resplandor, la vulgar carcajada,

 trueno desgarrador en mis entrañas,

todo era verde, azul, blanco, verde,

el dolor frío en todas mis venas,

la niebla daba vueltas alocadas,

el silencio invadía mis sentidos,

la luna se ocultaban para siempre,

el verde, la noche, la oscuridad,

 llegó la  Nada, simple, soledad,

   como volar, como cerrar los ojos,

dormir siempre, sin temor, sin mañanas.

Tu amor, dónde está, no pude partir,

soy la sombra en la neblina nocturna,

Dónde estás, amor mío, dónde estás,

 mi lamento solitario te llama,

dónde estás amor mío, dónde estás.


 
  • Autor: Gerardo Barbera (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 28 de mayo de 2013 a las 11:10
  • Categoría: Sin clasificar
  • Lecturas: 351
  • Usuarios favoritos de este poema: CARMEN, claudia07
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios1

  • claudia07

    hermoso y triste poema amigo , un desesperado llamado a un amor ,abrazos



Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.