Ilusión que vas y vienes en tus pasos libres
y que te vas entregando en alma y cuerpo,
te acoges en la piel del sensible
y de todo aquel, que ama a tiempo.
Y se ama, y se siente, resistiendo a los golpes,
al llanto, a los gritos, a la soledad.
Se envejece la mirada y el miedo te paraliza
sin poder articular palabra. Piedad !
Piedad, grita el silencio de la mente y del corazón.
Respeto, para esas palabras que no son de amor.
Respiro para no ahogar el llanto hasta la saciedad.
Cambios en la vida de la clandestinidad surgida por el dolor.
Esa incapacidad de movimientos que se acurruca
en la almohada amiga, de ese mar de lágrimas,
que no saben como demostrar su tristeza
escondida en el hueco de la desesperanza.
Tratos voluptuosos de odio malvado y frustrado,
que alimenta su ego en la cobardía de sus torpes agallas,
muertas por dentro, destruidas y vencidas,
por el desaliento de su personalidad dosificada.
Como dosificada es su incoherencia personal,
que se deleita con gritos y asesinando,
arropándose en su cobardía manipulada.
Deja de alimentar tu alma negra de suciedad. Cobarde!
de mujeres concebidas para el verdadero amor!
MarisaLlum
- Autor: MarisaLlum (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 5 de junio de 2013 a las 05:40
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 61
- Usuarios favoritos de este poema: auzie, Viento de amor
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.