He tocado tantas veces a tu puerta,
Recibiendo desprecios siniestros,
Que mi razón trata de entender.
En qué momento me convertí en nada?
En dónde quedaron los miles de segundos compartidos?
De verdad es ésto lo mejor para mí y para tí?
Lo dices tú o tus circunstancias?
...Me retiro sumergida en la tristeza flagelante,
Me pregunto si la vida me permitirá...,
Si podré dejar éste amor a un lado,
Si tendré la dignidad de decirme y decirte basta!
Y me juro que no derramaré más tinta por tu causa,
Pero las letras se me desbordan solas,
En estampida salen por doquier,
Unas gritan, otras lloran,.... se arrepienten.
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