Os saludo amigos.
Intentaré entrar más a menudo aunque no sea tanto como deseo.
Por razones de problemas visuales no puedo estar en el ordenador, por esa razón no podré hacer muchos comentarios, pero abrí para intentar comunicarme poco a poco con todos ustedes porque os hecho mucho de menos.
Un abrazo.
Profesionales del pecado.
Artesanos del mal.
Vestidos con elegancia,
se escabullen de la autoridad.
Venden su veneno
con impunidad y descaro,
dejando tras de sí verdaderos estragos.
Utilizan a los débiles
para llenar sus arcas,
mientras entre rejas acaban
estos pobres desgraciados
que consumiendo tal ponzoña
terminan envenenados.
Familias destrozadas.
Jóvenes mutilados.
Mayores que engañan.
Muchachos engañados.
Nadie reniega de los que se hacen ricos
a costa de jóvenes incautos,
de seres enfermos
enganchados a la droga,
para siempre destrozados.
Falsedad e hipocresía
a esta sociedad nos ciega.
A los jóvenes despreciamos.
A sus asesinos alabamos
por hacerse ricos en dos días,
sin preguntarnos de donde sale
tanto caudal acopiado.
Y si un día se descubre,
que suculenta fortuna de sangre está teñida,
lo negamos.
No queremos reconocer nuestro error,
prefiriendo poner el antifaz,
y a los jóvenes culpar.
Esos amigos adulan,
invitan a banquetes,
y con fiestas obsequian
a personas muy honradas,
que tampoco se preguntan
de donde salen sus riquezas.
Nos encandilan con sus coches,
con mansiones de mal gusto,
con yates y joyas con grandes pedruscos,
mientras los jóvenes acaban
entre rejas o en el camposanto.
Se destrozan las familias.
La sociedad está asustada,
pero les seguimos el juego
a los que poseen el dinero
con mal proceder ganado.
Se les imputa a los jóvenes
la causa de tanta desgracia,
siendo los adultos los dueños
de las sociedades fraudulentas,
de los navíos que trasportan yerbas
que trastornan y matan.
Mientras se pasean por calles y salones
haciendo gala de poderío,
patrocinando acontecimientos
para ocultar sus fechorías.
Hay quienes agradecidos les aplauden sus legados,
mientras a sus espaldas se les trata de malvados.
Los que con la justicia topan,
pagan brillantes abogados
que no puede pagar el pobre,
pero sí los mafiosos adinerados.
AUTORA: Escapitina. Luisa Lestón Celorio
Del poemario- DE CORAZÓN- Editorial Arcibel Editores
- Autor: ESCAPITINA -Luisa Lestón Celorio (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 10 de julio de 2013 a las 15:53
- Comentario del autor sobre el poema: Afortunadamente no tengo en mi familia cercana ningún caso de drogadición, pero estuve muy cerca de madres y jóvenes que se fueron de este mundo a causa de este mal.Terrible experiencia.Eso me hace gritar ya que poco más puedo hacer por esas criaturas y sus familias.
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 103
- Usuarios favoritos de este poema: Yolanda Barry, grabra, nellycastell
Comentarios1
Una gran radiografía de lo que está ocurriendo en este mundo globalizado, y a merced de las mafias organizadas que lucran con la peor de las muertes; la del alma humana, porque quienes se "nutren " de las drogas, además de provocarse daños físicos, van dejando de ser, para convertirse en algo parecido a un ser humano. Creo que lo único que puede detener este flagelo de la humanidad es, denunciando sus consecuencias, especialmente a los niños, para que no incurran en su consumo por ignorancia. Luego ya es tarde...
Querida amiga, ¿qué poder tendrán las mafias para que hasta en las puertas de los colegios monten su negocio!
Es tremendo querida.
luisa
Lo sé amiga. No es diferente a lo que ocurre en mi país y en mi ciudad. Si por algo estoy feliz de haberme jubilado, es porque sabía que estaba al borde de la muerte; ya por impotencia, o porque me iban a matar. Los últimos tres años fueron de terror para mí; igual traté de revertir, advertí, lo que pude, dialogamos con los padres, les dieron charlas, pero convivir con adictos en una clase, es muy malo en todo sentido, tanto para los compañeros ,como para los docentes. Un gran abrazo Luisa y Gracias! Cristina
Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.