28 de Junio
Me encuentro en casa en página Word tratando de imaginar un poema.
Comienzo a escribirlo. Mi hermana se encuentra en la galería mirando un partido de basket. A las 11.05 a.m. me dice: "Hugo, me voy a la panadería a comprarle unas masas a las chicas del laboratorio. Siempre son tan atentas conmigo, que les debo esta atención."
"Bueno", le respondí. Seguí escribiendo. A las 11.15, exactamente diez minutos después, tocan timbre. Atiendo. Una voz me dice: "Señor, tengo a su hermana en mi coche. Se ha caído". Inmediatamente salgo a la puerta de calle, después de ir corriendo por pasillo. Abro puerta y al acercarme al vehículo, veo sentada a mi hermana, con un rostro de dolor. Este buen señor me comentó que al pasar por donde ella se encontraba tirada sobre la vereda, con el auxilio de un señor que estaba trabajando en las inmediaciones, la levantaron para subirla al coche.
Al tratar de subir un escalón que se hallaba en la vereda, erró la distancia de su altura, tropezó y cayó.
Este buen señor, cuyo nombre es Jorge, se ofreció llevarnos al hospital.
Fuimos los tres. Llegamos. En un sillón rodante, la trasladaron para sacarle una radiografía. El resultado de ella: fractura de cadera.
Desde allí, la trasladaron a un espacio reservado, en el cual la colocaron en una camilla, inyectándole suero.
Estuvimos desde las 11.20 a.m. hasta las 18 p.m..
Yo allí con mi hermana, custodiándola desde muy cerca sobre todo por sus pertenencias personales. Desde nuestra llegada hasta nuestra partida, estuve parado, sin tomar asiento porque no existía, sin probar bocado, ni beber agua siquiera.
Por intermedio de su afiliación, estuvieron tratando de conseguir sanatorio para trasladarla.
Ya a las 16.30 p.m. le habían destinado el sanatorio, pero la ambulancia pasó a buscarla a las 18 p.m..
Llegamos al sanatorio diez minutos después. Le hicieron unos análisis previos. Recién a las 19.45 p.m. tomó posesión de su respectiva habitación.
Está ubicada en segundo piso, habitación 28.
Desde que me enteré de su accidente, constantemente pensaba lo que mi madre me había pedido unos días ANTES DE FALLECER: "HUGO, CUIDA A TU HERMANA", me dijo. Fue en el año 1974.
Desde el momento que dejé de escribir lo que estaba haciendo en Word, lo dejé inconcluso.
Desde ese momento, se me fue toda inspiración. Lo importante para mí, sólo era ocuparme de mi hermana, como le había prometido a mi madre.
5 de julio
En este día, a las 7.15 a.m. la llevan al quirófano. Le realizan la operación. Parte de la familia estamos a la expectativa. A las 10.15 a.m. finalizan diciendo el médico titular que "la operación fue exitosa".
Todos reconfortados.
En el sanatorio he conocido casos de enfermos. He conocido a los muy buenos profesionales, como a las enfermeras/ros de buenos tratos y los que no muy bien tratan a los pacientes, son los menos, pero existen.
Como también los pacientes dóciles y los no muy.
8 de Julio
A Marta por fin le dan el alta. Gracias a Dios está con muy buen ánimo. Igual que todos nosotros, su familia.
Salió a la 1.30 p.m...
Al día siguiente ya comenzó a dar sus primeros pasos en andador.
Ha comenzado ya a hacer kinesiología. Tiempo al tiempo. Tiene y tenemos que tener paciencia y fe.
Ella, con su soledad y sus compañias de la vida.
Hugo, con su soledad y sus compañias de la vida.
Ambos, unidos con nuestros amores presentes y pasados.
Cada uno con su vida afectiva.
Hermana, sangre de mi sangre.
Madre... estoy cumpliendo con la promesa que te hice en vida, antes de unirte al Señor.
Hasta el final de mis días he de tener en cuenta tu pedido: "Hugo, cuida a tu hermana".
Lo haré madre, por siempre.
Todos los derechos reservados del autor (Hugo emilio Ocanto - 10/07/2013)
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Autor:
hugo emilio ocanto (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 10 de julio de 2013 a las 23:19
- Comentario del autor sobre el poema: Hola mis amig@s. Nuevamente con ustedes, después de varios días de ausencia. El motivo aquí les expongo. El Señor esté siempre con todos nosotros. L@s quiero, desde siempre. Gracias a todos mis poetas y poetisas que tan buenos augurios de salud me brindaron.
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 47
- Usuarios favoritos de este poema: Hugo Emilio Ocanto, Angel Reyes Burgos, Hija del Sol, xiomara jaqueline gonzalez rassman
Offline)
Comentarios6
Gracias a Dios, cabellos de plata.
Aplaudo tu disposición de cumplir, por siempre, la promesa.
Fiel al amor y a la sangre...
Abrazos y besos, amigo lindo
¡¡Te quiero mucho!!
Gracias, mi querida amiga Gisell. Abrazos y besos, amiga del alma.
¡Te quiero mucho!
Hugo Emilio.
Que bien que todo salió bien, y que tu sigas cumpliendo la promesa que le hiciste a tu madre.
Te envío un gran abrazo amigo, extensivo a tu hermana con deseos de su pronta total recuperación.
Saludos.
Claudia Alhelí Castillo
Gracias por acompañarme Claudia y por tus deseos. Mis saludos.
Hugo Emilio.
Ante todo me alegra el final feliz. Sobre lo que haces cuidando a tu hermana, te eleva como ser humano, porque si bien dices que estás cumpliendo con el pedido que te hiciera tu madre: tú lo haces por tu sentido de responsabilidad filial, por generosidad, y por el amor que se profesan dos hermanos que por lo que dices, se tiene uno al otro. Hoy este hecho se presenta como algo un poco raro, al igual que atender a los mayores de la familia: padres, tíos, abuelos. Con o sin necesidad esta tarea es transferida a particulares que los "atienden" y que generalmente no brindan amor. Felicitaciones por la paz de tu corazón aunque tal vez los huesos duelan. Un gran abrazo para ti y besos para tu hermana también. Desde Uruguay Cristina :macridi
Cristina, poetisa: muy alentadoras son tus palabras. Todo esto por lo cual estoy participando es porque tengo en cuenta el gran amor que debemos tenernos entre hermanos. Sobre todo, en mi caso, con la recomendación que me dio mi madre. Sus palabras quedaron grabadas en mi alma y sentimientos. Aún teniendo tanta diferencia de personalidad (ella es mucho más buena que yo, me refiero solamente al carácter), llevamos en nuestro ser la sangre de nuestros padres. ¡Cómo abandonar a esta mujer que cuando era niña era la alegría de nuestros padres y de nosotros, sus hermanos! Gracias Cristina por estar en este momento junto a mí, en este caso, a nosotros. Valoro enormemente tu sentir. Seres así, como tú, son los reconfortan mi alma. Mi corazón pertenece al mundo. Amar al prójimo es una maravilla del alma humana. Gracias en nombre de mi hermana y de mi parte. Tienes un corazón de oro. No dejes de pensar y ser así. La vida es breve, juntemos los seres del mundo nuestras manos y amémonos más los unos a los otros. Un abrazo de mi parte y de mi hermana Marta. Besos de ambos para ti. Dios te bendiga.
Hugo Emilio.
Gracias por tu sentido comentario. Comparto tus palabras y los buenos sentimientos. Tienes razón en decir que es necesario que nos amemos los unos a los otros; solo así podemos afrontar las vicisitudes que la vida nos pone en el camino y bregar por un mundo mejor. No soy la mejor persona del mundo, tengo muchos defectos, pero me gusta dar amor y me hace feliz recibirlo. Regojo las bendiciones y les deseo un sin fin de felicidades, y buena salud para ustedes; especialmente para Marta, que se restablezca pronto, y para ti dos besos por se tan buen hermano. Cristina
Gracias, amiga. Mi hermana y yo retribuimos tu atención y solidaridad. Dos besos para ti, poetisa.
Hugo Emilio.
Mi querido amigo, en esta vida todo lo bueno que hacemos se nos devuelve multiplicado...Yo me alegro por tu hermana y por ti que estes por aquí aunque yo ando muy alejado. Un abrazo y feliz día.
Gracias por tu comentario Angel. Sí, estás un poco alejado, pero a los buenos valores literarios, siempre se los recuerda. Un abrazo para ti, y pases feliz día.
Hugo Emilio.
Mi amigo, gracias a Dios ese percance de vida ya está pasando, ninguno está libre de eso y gracias a él también, ella te tiene en cuerpo y alma para atenderla y amarla, para cumplir la promesa que le hiciste a tu madre. Dios les bendiga amigo del alma y les permita salir pronto de la situación. Les abrazo fuerte enviándoles buenas energías por la salud de ambos.
FELIZ DE VERTE DE NUEVO AMIGO.
Lislis, amiga, gracias por tu comentario. Dios te bendiga a ti también, por estar siempre junto a mí. Ambos te agradecemos tus buenas energías enviadas y recibidas con mucha satisfacción. FELIZ DE HABER VUELTO Y ESTAR CON USTEDES. Por ahora no leo a todos, pero ya he de tener más tiempo para poder hacerlo y comentar. Mis disculpas. Un fuerte abrazo.
Hugo Emilio.
Ahora soy Yo , bienvenido. Gracias a Dios que todo salió bien.
Abrazos infinitos feliz noche.
Hola Xiomara. Gracias a Dios, sí, ahora continúa post operatorio. Abrazos infinitos. Pases un feliz día.
Hugo Emilio.
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