Tal tristeza había
en sus ojos maternales,
que llorando, luego, María
pasó entre los chacales,
para vertir su agonía
frente a los despojos mortales
de el Dios que sabía
ajeno a los males.
Se postró de rodillas
mirando al sacrificado,
corría el llanto por sus mejillas
mientras decía en tono resignado,
aquí esta el mejor de las semillas
y para salvación se ha sembrado.
- Autor: YULERIA (Seudónimo) ( Offline)
- Publicado: 16 de julio de 2013 a las 08:08
- Categoría: Espiritual
- Lecturas: 49
Comentarios1
Bravo, amigo... Sensiblemente hermoso... Y bien logrado... Un gusto leerlo...
Un saludo con abrazo
gracias por ingresar a mi rincón, me agrada que le haya gustado, esa es la idea. Un abrazo.
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