La lluvia, el mar, la realidad,
La bella forma en que me enganas
el susurro de tu falsa verdad,
La perfecta manera en que todo su mentira entrana.
La inocencia que tan feliz me hizo
De nino, de grande y de viejo,
Ese placer de creer almundo fijo
de no pensar en muerte ni en mundo
De ante todo quedar perplejo.
La luz, lo real y la falsedad,
Casi de la mano como uno solo,
Formando la realidad,
La belleza mundana de lo mortal,
Lo simple, lo sencillo, lo complejo,
Todo hecho con un poco de mentira y un poco de verdad.
Tus ojos, con su maravillosa hablidad de enganar,
Mi corazon, y su exquisites al caer vivamente en su engano,
Y tus labios bribones con los mios al besar
Y la vanal forma con que tu corazon solia amar.
La piedad, la ayuda el placer,
Cierto que nada habita en una forma pura y simple,
Incluso la mentira arruya un de verdad
Incluso la verdad arruya un poco de mentir.
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Autor:
Joaquin Montreal (Seudónimo) (
Offline) - Publicado: 21 de julio de 2013 a las 04:55
- Categoría: Reflexión
- Lecturas: 83
Offline)
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