LAS ESQUINAS

carminha nieves

                                                            

 

Mientras la vida, recurre, normal, no damos cuenta de tantas cosas buenas que tenemos. Si alguien  a quien queremos se muere, paramos y pensamos que no vamos a ultrapasar el disgusto.  En momentos difíciles, nos sentimos abandonadas por la suerte.  Mientras las cosas siguen con  suavidad, ni pensamos lo que puede aparecer al doblar una esquina de nuestro camino. Cogidos de sorpresa, quedamos sin descernimiento, bloqueamos, algún tiempo pasa hasta caer en la realidad. Entonces ponemos a trabajar nuestro celebro a cien a hora intentando solucionar todo y al mismo tiempo entender lo que pasa.

El peor viene después, un día estamos confiados, los otros desilusionados, incertidumbres, rabia, nos sentimos solos, sin saber  quién o el que nos podrá ayudar. Pasa el tiempo,   cansados, infelices, de repente ganamos fuerzas y volvemos a estudiar el asunto, tomamos decisiones, pero casi nunca las ponemos en práctica. En el fondo esperamos que todo se resuelva por sí solo. Es un para e corre, es un mal estar, la cabeza casi explotando, de tanto dar vueltas, al final pasan los días, el tiempo sin vivir, solo obcecados por el tremendo  dolor que sentimos.

Revoloteando como mariposa al redor de una bombilla encendida, quizá paremos si ella se hunde. Querer vivir y tener un poco de sencillez es difícil, más deprisa  terminas con el olor de un vertedero de basura, do que resuelves lo que te machaca el pensamiento.

Los tiempos, dicen  son difíciles, el que he tenido desde que nascí, siempre lo fue. Será mi manera de ser, será mi falta de voluntad, será que no sé explicarme. Algo pasa, el qué no lo sé.

Infantilidad de mi parte pensar que me aceptan como soy, abierta demás y franca. Nada oculto, nada hago con falsedad, quizá sea en demasía transparente y dando mi sitio a los demás. No lo sé. Solamente ando como una zombi, en este no saber qué hacer.

En el todo que al final es nada, como circonio imitando el diamante, al caer se deshace, el diamante nunca, quiero ser uno más.

Cuantos se estarán quejando que no hay sol para tostarse acostados en una playa o piscina cualquiera, otros  porque  no han podido ir de vacaciones, nada tuve de estas cosas, me usurparan todo. No me importa, solo quiero salud e sentir la mano pesada de la justicia Divina, duela lo que duela a quien la merezca.

Mi cuerpo tenso clama por relax, mi cabeza por aire fresco, mi corazón por algo que deseo, ver aplastados en su rencor otros corazones.

Agosto, Agosto, ¡tan distinto de otros pasados! ¡Qué triste es  ser, tener, sentir y no poder vivir!

Quizá otra esquina, me devuelva lo que he perdido  en esta desilusión, que me ha cogido de improviso sin contar.

Querré siempre vivir, amar y ser el diamante que  no pierde el brillo.

Oporto,6 de Agosto de 2013

Carminha Nieves

  • Autor: secreet50 (Seudónimo) (Offline Offline)
  • Publicado: 9 de agosto de 2013 a las 06:32
  • Categoría: Reflexión
  • Lecturas: 50
  • Usuarios favoritos de este poema: El Hombre de la Rosa
Llevate gratis una Antología Poética ↓

Recibe el ebook en segundos 50 poemas de 50 poetas distintos


Comentarios +

Comentarios1

  • El Hombre de la Rosa

    Gratificante y genial tu sensacional poema amiga Carmina Nieves
    Saludos y abrazos de amistad
    Críspulo tu amigo

    • carminha nieves

      Amigo Críspulo, por mi cara se nota que estoy pasmada, com lo que passa en mi vida.
      Gracias por tu copmpañia,
      Un abrazo de amistad,
      Carminha Nieves



    Para poder comentar y calificar este poema, debes estar registrad@. Regístrate aquí o si ya estás registrad@, logueate aquí.